El novelista Michael Crichton dijo que la historia era “la herramienta con la que poder definir a toda una sociedad”. Sin pretender un análisis tan exhaustivo, hoy desde EL IBÉRICO os presentamos una colección de curiosidades históricas relacionadas con el Reino Unido con las que entreteneros un poco:
1. El origen de la expresión “bless you”
Lo habitual en el Reino Unido es que ante un estornudo la gente que te rodea replique con un “God bless you” o la forma abrevida más común de “bless you”, equivalente a nuestro “salud” o “Jesús” en español. El uso de esta expresión se remonta a inicios del 1600, cuando se extendió la creencia de que el diablo pudiera adentrarse en el cuerpo aprovechando el momento del estornudo, con lo cual se popularizó el uso de la bendición como método para garantizar protección.
2. La primera calle en asfaltarse
Hoy los paisajes urbanos están dominados por calles asfaltadas, pero fue hace poco más de un siglo cuando se comenzaron a pavimentar las carreteras. En 1902, Edgar Hooley acudió a ver qué había sucedido, dado que se había formado un tumulto de gente en uno de los tramos de la calle Radcliffe Road, en la ciudad de Nottingham. Un barril de alquitrán había caído al suelo y abierto accidentalmente, cubriendo buena parte del pavimento. El topógrafo contempló que el componente derramado había creado una superficie lisa y regular perfecta para la circulación de los carros de caballos y otros vehículos, con lo que propuso ampliarlo a todo el recorrido del tramo. El éxito de tal fórmula fue palpable desde el principio, no tardó en extenderse y en el plazo de unos años no tan sólo las principales vías del Reino Unido fueron asfaltadas, sino también las de la mayoría de los países del mundo.
3. Un cálculo aproximado…
El físico y químico británico Henry Cavendish fue el primero en calcular el peso de la tierra en 1798, una cantidad que el científico estimó en 6.600 trillones de toneladas. Tomando en cuenta los vetustos instrumentos de los que por entonces se hacía uso, el cálculo no fue tan desacertado, si bien posteriormente se revisó la cantidad a la baja considerando que es aproximadamente de 5.975 trillones.
4… y otro algo menos preciso
Una de las fotos más típicas en Londres puede ser aquella en la línea del Meridiano de Greenwich donde apoyamos un pie en lo que sería el hemisferio este y otro en el oeste. Una foto que millones de personas deberían revisar dado que varios cálculos han demostrado que la línea divisoria no pasa por donde exactamente debería hacerlo.
Dado que la tecnología actual es mucho más precisa en el cálculo de la longitud de lo que lo era la utilizada en el siglo XIX, en los últimos años se ha recalculado por donde debería pasar el meridiano, teniendo en cuenta aspectos como las distorsiones locales en la gravedad causadas por la Tierra. Con los métodos actuales, que utilizan un sistema de posicionamiento global basado en información satelital, se ha confirmado que el lugar donde éste debería pasar es en realidad 102 metros atrás, en un tramo indiferenciado del parque trasero, donde están ubicados unos cubos de basura.
5. Martillos contra submarinos
Parece un enfrentamiento desigual, pero en esta confrontación entre David y Goliat fueron los martillos los que sacaban ventaja a los submarinos. Al principio de la Segunda Guerra Mundial los sumergibles alemanes se guiaban con periscopios ya que carecían de radares. Los británicos tenían fácil anularlos, ya que les bastaba con destrozar el visor para provocar que el artefacto tuviese que salir a flote haciéndose rápidamente identificable.
6. Una licencia artística
Al pensar en un San Bernardo, a todos nos viene a la mente la típica imagen del perro de gran tamaño que camina entre la nieve acarreando un pequeño barril de coñac al cuello con el que revitalizar a aquellos que han quedado sepultados bajo un alud de nieve. Una imagen que se puede haber transmitido de generación en generación, pero que en realidad jamás se dio. Todo procede de una licencia artística del pintor británico Edwin Landseer, el cual alcanzó gran popularidad por sus pinturas costumbristas y sobretodo los famosos leones que adornan Trafalgar Square, y que en una de sus obras decidió añadir estos depósitos a los cuellos de los mastines.
7. Un plagio parcial
¿Fue Charles Darwin el creador de la teoría de la evolución? Sí y no. El científico británico ha pasado a la historia como el artífice de ésta, algo que en su época le valió ser vilipendiado por los sectores más conservadores. No obstante, parece ser que su trabajo no es del todo original, ya que se cree que en gran parte pudo inspirarse en las obras que el también naturista Alfred Russel Wallace había desarrollado años antes y en el que ya se hablaba de un mecanismo similar a la selección natural.
8. Una colonia penal
Siempre se ha dicho que Australia fue colonizada con presidiarios, algo que en parte es cierto. La primera “colonia penal” fue establecida por el capitán inglés Arthur Phillip en 1788, en el espacio que hoy ocupa la ciudad de Sydney, con 752 convictos y cerca de 250 soldados y familiares de éstos. En los años posteriores continuó el desembarco de presos procedentes de Inglaterra y otros países de su entorno. Los penados se redimían de sus condenas con trabajos en los campos e industrias de ciudadanos libres, tras lo cual eran premiados con la libertad. Se cree que hasta 1868, año en que llegó el último barco con presos, cerca de 162.000 hombres y mujeres con antecedentes penales fueron reubicados en el país austral.
9. Uno de los emblemas de Escocia
Así como la rosa es uno de los símbolos de Inglaterra, el cardo lo es de Escocia. Ello se debe a la abundancia de éstos en las zonas rurales, pero sobre todo a que una de estas plantas fue crucial para cambiar la historia del país. Existe una leyenda que dice que un pueblo se salvó de una invasión vikinga gracias a un manojo de cardos. Durante la noche, los bárbaros comenzaron a entrar en las casas con intención de saquearlo. Lo hacían descalzos para minimizar los ruidos. Uno de los soldados no percibió un manojo de cardos en el suelo de una de las casas, y las espinas de dicha planta provocaron que comenzara a ulular de dolor. Los gritos despertaron a los vecinos, que pudieron organizase para repeler la invasión. Días después adoptaron el cardo como emblema, algo que acabó por hacerse extensivo a todo el país.
10. Llamando al 999
Éste número se sigue usando en el Reino Unido como número de emergencias, junto al más estandarizado 112. El uso de dicho número comenzó en Londres y sus alrededores en 1937, después de que un incendio dos años atrás provocara la muerte de 5 mujeres. Un hombre había llamado para avisar del incidente, pero fue puesto en espera y durante ese tiempo el fuego se propagó. Las autoridades optaron entonces por habilitar un número específico, que en caso de ser marcado tenía preferencia sobre cualquier otra llamada. El 999 era no tan sólo fácil de recordar, sino que también se podía marcar en un teclado rotatorio en una situación en la que el humo o cualquier otro elemento hubieran reducido la visibilidad, ya que simplemente se debía ir hasta el tope del marcador.
El número se extendió en los siguientes años por las ciudades más grandes del Reino Unido, pero hubo que esperar casi 50 años para que se convirtiera en el número de emergencias oficial para todo el país.