La corona británica pasa por ser una de las instituciones más valoradas entre los ciudadanos del Reino Unido. Presente desde antes incluso de la creación de Inglaterra, hoy desde El Ibérico os comentamos algunas curiosidades sobre uno de los emblemas más representativos de este país:
1. Valorada en 55.000 millones de euros
El presupuesto de la Casa Real Británica es de aproximadamente 45 millones de euros, lo que la convierte en una de las monarquías más caras del mundo. Como media, cada ciudadano debe costearla desembolsando 70 céntimos de euros.
No obstante, parece una inversión rentable, dado que su atractivo turístico y comercial hacen que dicha institución se valore en unos 55.000 millones de euros. Según la consultora Brand Finance, el merchandising en torno a ésta genera unos ingresos anuales de 20.000 millones de euros, cantidad que se dispara con bodas, nacimientos o eventos conmemorativos.
2. Isabel II es Isabel I y II
La reina Isabel II (Elizabeth Alexandra Mary) es la actual monarca y jefa de estado de hasta dieciséis
estados soberanos de los Reinos de la Mancomunidad de Naciones. Es Reina de Canadá o Australia, duque (duke) y señor (lord) de las Islas del Canal y de la Isla de Man respectivamente, que son dependencias de la Corona y no pertenecen al Reino Unido, o jefe supremo por el Gran Consejo de Jefes en la República de Fiyi.
Las coronas inglesa y escocesa fueron unidas en una sola persona en 1603 cuando Jacobo VI de Escocia y I de Inglaterra accedió al trono, y desde entonces los monarcas han reinado con diferentes números para ambos territorios. Inglaterra contó previamente con la Reina Isabel I, pero no así Escocia, lo que hace que el emblema de la realeza británica en dicha región sea distinto.
3. El nombre bajo el que se reina es electivo
Una de las primeras preguntas a las que debe contestar un nuevo soberano al acceder al poder es bajo que nombre quiere reinar. Y es que esto no estará determinado por su nombre pila, sino por el que el Rey o Reina elija.
La princesa Alejandra de Kent pasó a ser la popular Reina Victoria; el Príncipe Alberto, duque de York, reinó como Jorge VI; o el Príncipe David, príncipe de Gales, cambió su nombre a Rey Eduardo VIII.
En ocasiones hay razones específicas para cambiar el nombre. Por ejemplo, si algún día el Príncipe Carlos reina, se espera que lo haga con el nombre de Jorge VII. El nombre de Carlos cuenta con funestos antecedentes, ya que el primero fue ejecutado, el segundo vivió en el convulso tiempo de la República de Oliver Cromwell y el que debía ser el tercer Carlos (conocido con el sobrenombre de “Bonny Prince Charlie”) jamás llegó a reinar.
4. Reinados de más de 50 años
En la larga historia de la institución británica ha habido hasta el momento seis monarcas que han permanecido en el poder por cinco o más décadas. El honor corresponde a la Reina Victoria (63 años), los reyes Jorge III (59 años), Enrique III (56 años), Eduardo III (50 años) y Jaime VI de Escocia y I de Inglaterra (58 años), y por supuesto, la actual Reina Isabel.
5. Reina viajera
La actual Reina Isabel II se ha hecho famosa por sus numerosos tours y visitas a países extranjeros. Quizás la visita oficial más peculiar fue realizada en abril de 1954, cuando la Reina, en representación de la Corona Británica, acudió a la Isla del Coco, una pequeña isla de menos de cuatro kilómetros de largo perteneciente a Costa Rica y que técnicamente está deshabitada.
6. El perro de la Reina
El Corgi Galés Pembroke es una raza de perro nativo de Gran Bretaña, que durante siglos ha sido utilizado como perro pastor. Hoy en día la mayoría de ciudadanos del Reino Unido lo conocerán como el “perro de la Reina”.
La Reina ha tenido más de 30 corgi durante su mandato, comenzando con Susan, que fue un regalo de cumpleaños en 1944. La mayoría de los siguientes corgis han sido descendientes de Susan. En la actualidad Willow y Holly son los dos corgis que acompañan a Su Majestad, y es posible que sean los últimos de dicha estirpe dado que la Reina ha manifestado su deseo de no tener más perros.
7. Buckingham Palace vs St James’s Palace
Desde 1837, cuando la Reina Victoria se trasladó al Palacio de Buckingham, éste se ha convertido en la residencia oficial del Monarca. Pero aun siendo dicho palacio el lugar donde el monarca vive no es el lugar donde reside la monarquía.
Antes del traslado al Palacio de Buckingham, se usaba St James’s. Pese al cambio, el segundo continúa siendo técnicamente el hogar de la monarquía británica como institución, y lo demuestra el hecho de que la proclamación de un nuevo Rey o Reina o la acreditación a diplomáticos de otros países se realiza hacia la Corte de St James’s.
8. La soberanía nunca muere
Los Reyes y Reinas mueren, pero el mecanismo sucesorio británico se asegura que la no lo haga la soberanía, de modo que siempre tiene que haber un monarca en el poder. Cuando se produce un deceso, el o la siguiente en la línea sucesoria le substituye de forma inmediata. Como resultado, el estandarte real no ondeará, como norma general, a media asta. Hay sólo una excepción, y es cuando el cuerpo del recién fallecido monarca está en un edificio, pero siempre que el Rey o Reina actual no esté en el mismo lugar.
9. Reina sin Rey
El marido de la actual Reina Isabel II es el Duque de Edimburgo Felipe, pero no ostenta el título de Rey. En el Reino Unido, como en muchos otros países anglosajones, cuando se celebra un matrimonio la mujer adopta el título y apellido del marido, pero no sucede lo contrario. Esto se hace extensivo a la Casa Real, y por ello en 1947 se asignó a Felipe Mountbatten el título de Duque, ya que su renuncia previa como Príncipe de Grecia le dejó sin ningún título real.
Gracias por la sencilla narrativa, tenía muchas dudas acerca de la monarquia británica, motivo sencillo que me entró esta mañana de domingo, de curiosidad solamente, como el autor se describe. Espero seguir leyendo más de usted Antonio. Un gusto.
Encantados de tenerle por aquí y gracias a usted Andrea por su tiempo. Seguiremos por aquí por una temporada seguro, un abrazo y que tenga un buen día.
BUENOS DÍAS ANTONIO
ESTOY EN MEDIO DE UNA INVESTIGACIÓN HISTÓRICA DE LONDRES CON FINES TURÍSTICOS Y SUS RELATOS ME HAN SIDO DE VALIOSA AYUDA MIL GRACIAS.
ME ENCANTARÍA PONERME EN CONTACTO CON USTED DE SER POSIBLE. DE NUEVO MIL GRACIAS