Llevo un tiempo observando que el autocastigo se ha convertido en una tendencia, en todo un trending topic. No existe persona más cruel y despiadada con nosotros que nosotros mismos. Personalmente, he conseguido identificar mis cinco puntos favoritos…seguro que tú tienes ya los tuyos en mente.
El césped siempre es más verde en el jardín del vecino.
Sonka Lyubomirsky realizó un experimento donde a dos individuos se les proponía completar un anagrama al mismo tiempo. Uno de ellos colaboraba con la doctora “de estrangis in the night”, pudiendo así realizar el ejercicio en mayor o menor espacio de tiempo. Las personas más felices resultaron ser aquellas que valoraban su resultado independientemente de los resultados de otro individuo, es decir, siempre va a haber alguien más fino que tú, y a la vez alguien peor. Intenta sentirte orgulloso de tus logros, que son muchos y variados.
The grass is greener in the other sideHappy in your skin.
¿Qué ganamos machacándonos de esa forma? En serio, piénsalo un momento, ¿Qué ganas repitiéndote lo fofo, bobo o viejo que estás? NADA. Yo solía tener un diálogo muy chungo, en ese aspecto, cada vez que me miraba al espejo. Ahora he tomado por costumbre tirarme algún beso y guiñarme un ojo – estas licencias solo me las permito en casa, a ver si te estás pensando que voy besando escaparates-.
De cabeza a los residuos radiactivos.
Buscando relaciones tóxicas que sabemos de antemano que solo nos traerán malos ratos. Tratamos de aplacar el vacío, que creemos tener en nuestro interior, poniendo nuestra valía y felicidad en manos de otras personas – que normalmente ya tienen lo suyo-. Tengo noticias frescas: si tú no te quieres y te valoras, nadie lo va a hacer. Es así, solo atraerás a tu vida a alguien que retroalimente esa actitud.
Utilizar tu cuerpo como bola de pinball.
Ya no solo es el dialogo interno que me repito, sino que además nos castigamos golpeándonos sin piedad contra todo lo que pillamos, muebles, esquinas, puertas de cristal… He observado que cuando me suceden este tipo de “accidentes” es cuando voy teniendo malos pensamientos -rumiando conversaciones negativas o pensando mal de alguien- ¿casualidad?, preguntaría Iker Jimenez, no lo creo.
Repostando gasolina adulterada.
Con la alimentación, que es el combustible de nuestro cuerpo y mente. Nos atracamos de alimentos procesados, bebemos veneno a modo de alcohol, pasamos de las frutas y verduras. Somos una perita en dulce, vamos. Eres lo que comes, te hayas en el estado de ánimo y físico en el que estás por ello. Defiendo que si es bueno para tu cuerpo, es que también es bueno para tu alma.
No te metas basura, niñaEn un mundo redondo y sin rozamiento:
-No me comparo.
-No me machaco.
-No me rodeo de arpías, ni de parejas inestables.
-Cuido mi cuerpo.
-No me intoxico.
¡¡Que la vida son dos días, chavalada!!
Me encantaría conocer cuáles son las formas más creativas en las que tú te castigas. Deja, que la reprimenda corre de mi cuenta, hoy me siento generosa…