Londres es la ciudad más grande de Europa. Según los datos de la Oficina Nacional de Estadística, la ciudad cuenta con casi 10 millones de habitantes. Sin embargo, y aunque parezca contradictorio, en la capital de Reino Unido se encuentra la calle con forma de media luna más pequeña de toda Europa. Su nombre es Keystone Crescent y se encuentra a pocos minutos de la estación de King’s Cross, muy cerca de la famosa Caledonian Road.
Esta pequeña calle semicircular, de aspecto totalmente victoriano, se construyó para albergar a los primeros trabajadores de la zona en el año 1846. Solo cuenta con 24 casas diseñadas por el británico Robert James Stuckey, hijo de un albañil residente en Shoreditch. Antiguamente, estas 24 casas llegaron a ser el hogar de más de 200 personas. La mayoría estaban alquiladas por la familia Stuckey, que residía en el número 2A de la misma calle.
Hoy en día, esta calle tiene protección especial. Sus casas se consideran residencias de Grado II, lo que significa que si algún propietario quiere hacer reformas en el edificio, necesitan un permiso específico.
El secreto de Robert Stuckey
Durante una investigación realizada en las casas de esta pequeña calle, se encontraron unas cartas escondidas debajo de la cama de Robert, las cuales revelaron su mayor secreto: Robert tenía una segunda familia. El creador de la pequeña calle se casó por primera vez con Hannah Bennewith, con quien tuvo 7 hijos. Años después, en 1864, se casó con Sarah Culver, con quien también tuvo 7 hijos, esta vez usando el apellido «James» (su segundo nombre). Hannah murió en 1857, pero las cartas revelan que las dos relaciones se dieron a la vez. De hecho, el primer hijo de Robert con Sarah, su segunda esposa, nació en 1841.