Es común escuchar que Londres es una ciudad muy cara, que es verdad, pero también es una ciudad con increíbles oportunidades para crecer como profesional o simplemente mejorar nuestras finanzas personales, si nos organizamos y tomamos decisiones de manera eficiente.
Obviamente todo el mundo puede gestionar su dinero como quiera, pero nuestro nivel de vida puede mejorar si mantenemos un ojo puesto en la economía doméstica.
Estos hábitos deberían enseñarse en la escuela debido a que la mayoría de los adultos en cualquier momento de su vida tendrán que gestionar su patrimonio y muchas personas luchan contra el problema de no tener dinero durante toda su vida. Por ello, desde El Ibérico te sugerimos estos consejos para que llegar a fin de mes en Londres no sea una epopeya.
1. Llevar una contabilidad de nuestra economía doméstica
Mantener un control sobre nuestros ingresos y gastos nos dará una visión global de nuestra situación económica. La forma más eficiente de controladas estas variables es tener una hoja de alance. Podemos hacerla nosotros mismos con un excel ( o similar) o descargárnos una plantilla.
Nuestra hoja de balance debe tener una descripción clara de todas nuestras fuentes de ingresos y nuestros gastos mensuales. Para que la hoja sea fácil de entender, tenemos que crear categorías para todas las fuentes de gasto ( comida,ropa ,transporte…); muchos nos sorprenderemos cuando veamos la cantidad de dinero que nos podemos estar gastando en cosas que no creíamos que fuesen un gasto importante, como por ejemplo en cerveza o tabaco.
2. Hacer un presupuesto de gastos
Llevar una contabilidad es un primer paso para mantener nuestros gastos bajo control. El segundo paso es el de hacer un presupuesto de nuestros gastos. En el presupuesto recogeremos todos los gastos que tenemos previstos para un mes. Pero, para que realmente nos ayude mejorar nuestra economía doméstica, debemos ser prudentes en la distribución de nuestro dinero. Algunos expertos recomiendan la distribución siguiente:
–50% Gastos diarios: Alquiler, facturas, Oyster, comida…
–10% Tiempo libre: Salidas de fin de semana, Teatro, Cine, Restaurantes …
–10% Ahorros: Gastos inesperados.
–10% Inversión: El dinero destinado a mejorar nuestra situación económica.
–10% Educación / profesionalización: Cursos, Libro, Seminarios ..
–10% Caridad (opcional).
Es cierto que vivir en Londres con solamente con el 50% de nuestros ingresos es muy difícil, especialmente por el alquiler, pero esta distribución sería lo ideal, no lo real ( al menos si no prestas atención a tu números). Debemos tratar de ajustar esta distribución a nuestra economía real. Si creemos que, por ejemplo, en comida gastamos mucho, podemos intentar reducir nuestro gasto en comida un 10%. Ésto no implica que dejemos de comer, pero comparando precios, marcas y supermercados, lo que no esté de oferta en Sainsbury lo puede estar en Tesco, Lydl, Morrisons, Aldi, o Asda…
¿Qué pasa si todo falla?
Si llevando una contabilidad de nuestros gastos, y haciendo un presupuesto, nos damos cuenta de que todavía nuestros gastos exceden nuestros ingresos, nos quedan dos opciones:
1- Reducir nuestros gastos: reducir la lista de la compra ( esas galletas caras, para cuando la situación esté mejor), comprar online, buscar un alquiler más barato, compartir casa / habitación, ahorrar en transporte yendo a trabajar en bici…
2-Aumentar nuestros ingresos: Trabajar más horas, crear una pequeña empresa, ahorrar algo de dinero e inviértirlo en un portafolio diversificado, compra una casa y la alquilarla… Hay muchas opciones y alternativas, si somos creativos tendremos nuestra recompensa.