Varias crías de oso panda del Centro de Protección y Estudio de los Pandas de Dujiangyan, ciudad bajo jurisdicción de Chengdu, capital de la provincia de Sichuan (al suroeste de la República Popular China), serán los encargados de coger el relevo del pulpo Paul y predecir que equipo va a ser el ganador del mundial de Brasil de este verano, según ha publicado el diario South China Morning Post.
El verdadero trabajo de los osos empezará a partir de la eliminatoria de octavos. En ese momento se les planteará la posibilidad de subir a dos árboles que llevarán pintada la bandera de los dos países que jueguen en su tronco. Antes de esto, en la fase de grupos, los osos tendrán que elegir una cesta de bambú con comida de entre tres posibles opciones para saber si una selección va a ganar, empatar o perder ese partido.
El famoso pulpo Paul, que acertó el ganador de ocho partidos donde se le pidió opinión (pero se equivocó con el campeón: el pensó que sería Alemania y en realidad fue España), ha dejado el listón muy alto para los pobres osos panda, que este verano tendrán la difícil tarea de adivinar que selección de fútbol se proclama nueva campeona del mundo.
