J.K. Rowling es el seudónimo que la editora propuso a Joanne Rowling para que la venta de ejemplares fuera mayor
J.K. Rowling (Yate, Reino Unido; 1965) puso a la venta su casa -una mansión del siglo XIX- valorada en 2,8 millones de euros hace escasos meses. Una residencia que sirvió de fuente de inspiración para escribir al menos cuatro novelas sobre el joven mago, Harry Potter.
Se estima que su fortuna solo es superada en el Reino Unido por la de la Reina Isabel II y que su patrimonio asciende a 700 millones de euros.
Es una de las mujeres más ricas del mundo (la escritora más adinerada según Forbes, y la primera persona en conseguir mil millones de dólares gracias a la literatura), pero esas cifras, que dejan a uno atónito, no borran un pasado lleno de amargura y soledad. «Fui lo más pobre que se puede ser en Inglaterra, casi homeless«, ha llegado a afirmar en su autobiografía. Y es que la escritora estaba divorciada, era madre de una niña y tenía que mantenerse gracias, en parte, a los famosos housing benefits (las ayudas del Estado para la vivienda).
Las dificultades fueron tan manifiestas que su libro, una vez terminado, no fue reclamado por ninguna editorial. Incluso fue rechazado por algún agente que no lo veía atractivo. Finalmente, después de que su agente estuviera un año buscando, la editorial Bloomsbury se decidió a publicarlo, en 1996.
Nadie habla de la pobreza tan bien como los que la han sufrido en primera persona, y de eso Joanne Rowling (la K es un añadido editorial para estimular la venta de ejemplares y un tributo a su abuela paterna, Kathleen) sabe un rato.
Una vida difícil mientras terminaba su primera novela en los cafés de Leith, un suburbio de Edimburgo. Y es que cuando se viene de tan abajo, las cosas se valoran el doble, por eso donó los beneficios de su quinto y sexto libro a la caridad.
Lugares de inspiración y localizaciones de la película
Es de sobra conocido que la inspiración le llegó a Rowling en un viaje en tren de Manchester a Londres, pero para escenificar esos pasajes que plasmaría en siete libros (La piedra filosofal, La cámara secreta, El prisionero de Azkaban, El cáliz del fuego, La órden del Fénix, El príncipe mestizo y Las Reliquias de la Muerte) y que tendrían su materialización en la gran pantalla en ocho películas (el séptimo ejemplar se dividió en dos cintas), necesitaba valerse de lugares físicos, y estos no fueron otros que las ciudades con las que tuvo un mayor vínculo sentimental. Su querido Edimburgo (lugar de residencia de su hermana y donde se trasladó tras su etapa en Portugal), Londres (de donde eran sus padres y donde vivió algún tiempo), y Oporto (donde residió durante dos años trabajando de profesora de inglés en un centro de idiomas; aquí encontró el amor, cuyo fruto se tradujo en su primer vástago: Jessica Isabel Rowling Arantes).
En esta ciudad portuguesa, dos fueron los enclaves que le sirvieron de inspiración: el Café Majestic, en el cual empezó a cavilar las aventuras del joven mago y donde en alguna de las mesas de mármol escribió algunos de los capítulos de la saga de Harry Potter, como El espejo de Oesed, que confesó que era su favorito de La Piedra Filosofal –ya que reflejó sus propios sentimientos en los de Harry en relación con sus padres muertos-. Rowling escribió desde el corazón, teniendo presente la reciente muerte de su madre por culpa de una esclerosis múltiple que la llevaba atormentando durante diez años.
La cafetería de Edimburgoen la que “nació” Harry Potter. / Javier Marcos.En Oporto también se encuentra la librería Lello, a través de la cual llegó a idear la biblioteca de Hogwarts, el lugar donde acuden los alumnos que quieren estudiar magia y viven de forma interna; el sitio en el cual transcurren todas las aventuras de Harry Potter, Ron y Hermione, protagonistas de la emblemática saga. No obstante, la cafetería The Elephant House, en Edimburgo, es el lugar al que se atribuye el nacimiento de Harry Potter, como bien indica el cartel que hay en el exterior.
Nuevos retos
Ella, como el personaje de aventuras que tanto éxito le reportó, también ha evolucionado y hace unos meses cambió totalmente de registro y publicó así su primera novela para adultos, The Casual Vacancy (Una vacante imprevista), con la que no ha alcanzado el éxito que logró con los manuales de Harry Potter, pero que ha revelado un cambio tan radical en su trayectoria como fue el de pasar del averno al paraíso en cuestión de meses.