Esther Tusquets, escritora
La literata visitó Londres para hablar de su gran amiga Ana María Matute y de su propia vida y obra
El sábado 7 de mayo tuvo lugar un encuentro literario con la escritora y editora Esther Tusquets en el marco del ciclo de conferencias Entre escritoras, organizado por el Centre for the Study of Contemporary Women´s Writing (perteneciente al Institute of Germanic and Roman Studies, de la University of London), en colaboración con el Instituto Cervantes.
La escritora Esther Tusquets.
Entre escritoras se celebró los días 6 y 7 de mayo y consistió en dos conferencias sobre literatura española con sello femenino, una impartida por Laura Freixas y la otra por Esther Tusquets. Ésta última se tituló De Esther Tusquets a Ana María Matute y trató sobre la larga amistad de Tusquets con la ganadora del Premio Cervantes 2010, una de las grandes figuras de la literatura del siglo XX; y también sobre la propia vida y obra de la invitada.
La velada comenzó con una introducción de la organizadora, María José Blanco, quien destacó la importancia de la obra literaria de Ana María Matute desde la posguerra así como la gran labor de escritora y editora de Esther Tusquets al frente de la editorial Lumen durante 40 años. María José cedió enseguida la palabra a la invitada, quien deleitó a los presentes con un recorrido de hora y media por sus memorias con una lucidez sorprendente a sus 74 años. Comenzó diciendo que Ana María Matute es una de sus mejores amigas desde que Lumen editara El saltamontes verde en 1960, el mismo año de la fundación de la editorial.
La escritora habló con gran elocuencia, honestidad y sentido del humor de su vida como editora y escritora, e incluso de su vida personal y la de su amiga. Dijo que le cayó encima la editorial –que estaba especializada en temas religiosos- sin quererlo cuando su padre, médico, la compró en 1960. Sin tener idea de edición de libros, la familia se puso a dirigir el negocio echándole imaginación y horas, hasta que se convirtió en una de las editoriales más consolidadas de España, con la obra de grandes nombres de la literatura, como Virginia Woolf o la propia Ana María Matute. De ésta comentó que era tan exagerada y amante de los perros como ella, entre otras anécdotas.
La incursión de Tusquets en la literatura como autora fue tardía, pues publicó su primera novela, El mismo mar de todos los veranos, en 1978, cumplidos los 40. Tusquets recordó que en su juventud escribió 5 páginas y se las enseñó a un amigo escritor, que le aconsejó que lo dejara, y que volvió a intentarlo una segunda vez, para fracasar nuevamente. Sin embargo, siguió escribiendo «a escondidas», y se editó a ella misma sin que nadie se enterara. Cosechó un gran triunfo inesperado con esta primera obra, al cual quitó hierro diciendo que no entendía cómo había tenido tanto éxito, para a continuación agregar: «El éxito es enormemente estimulante, así que escribí cuatro libros de un tirón».
Su gran pasión son los perros y el mar. Dijo esta frase de titular: «El mar es lo que más he amado». Siempre ha vivido rodeada de perros, y si por ella fuera recogería a todos los caninos huérfanos de la calle para cuidarlos. Cuenta que se dio cuenta un día de que algo no marchaba bien cuando sus perras la huían, pues, según dice, los perros huelen la enfermedad y la muerte. Se fue a visitar al médico, quien efectivamente le diagnosticó una enfermedad, de la que afortunadamente está ya curada.
Los entendidos en su obra dicen que su madre está omnipresente en ella, y la autora se explayó en la relación con su progenitora, a la que dedicó el relato Carta a la madre (1996). Habló de su trato ambivalente hacia ella y de lo mucho que la gente la quería a pesar de que a ella le resultaba pesada; y de su padre dijo que nunca le entendió, que para ella siempre fue un ser enigmático. Actualmente está preparando un libro de memorias de infancia con su hermano. Su infancia transcurrió en Barcelona en un ambiente acomodado, del que en el fondo no se consideraba parte, pues sentía que pertenecía al bando que había perdido la guerra.
En los últimos años ha publicado una trilogía de memorias sobre su vida de editora: Confesiones de una editora poco mentirosa, Habíamos ganado la guerra y Confesiones de una dama indigna. En ellos desgrana los entresijos del mundo editorial, incluyendo nombres y apellidos de muchos autores y editores que han sido protagonistas de las letras españolas durante los últimos 50 años.