El NHS inglés se enfrenta a un «éxodo masivo» de trabajadores que buscan trabajos mejor pagados como consecuencia de la crisis del coste de la vida, según han advertido varios ministros.
Y es que los responsables de sanidad temen que un número considerable de trabajadores mal pagados se marchen a buscar sueldos más elevados en el sector privado, en medio de la creciente inflación. El NHS cuenta ya con 110.000 vacantes, y teme que un mayor agravamiento de la crisis de personal «ponga en peligro» la capacidad de los hospitales para hacer frente a las listas de espera, que alcanzan cifras récord.
Los ministros se debaten ahora en conceder al personal del NHS una subida salarial superior a la del año pasado para ayudarles a mitigar los peores efectos del aumento del coste de la vida. Según los responsables sanitarios, si no se aumentan los sueldos de quienes cobran sólo 15 peniques por encima del salario mínimo nacional, se socavarán los esfuerzos por contratar nuevo personal.
Una subida salarial que se equipare a la que ofrece el sector privado a sus trabajadores
«Comprometerse a dar más dinero a los trabajadores peor pagados del NHS es lo correcto mientras la inflación se dispara y el coste de la vida aumenta», dijo a The Guardian Matthew Taylor, director ejecutivo de la NHS Confederation.
«Sin una subida salarial que al menos se equipare a la que ofrecen algunos sectores privados, corremos el riesgo de que se produzca un éxodo masivo de personal sanitario. El personal que abandone el NHS en el momento en que más se le necesita también pondrá en peligro los avances que el servicio sanitario está consiguiendo en la eliminación de las listas de espera», agregó Taylor al periódico británico.
Alrededor de 60.000 empleados tienen el salario más bajo del NHS, con 18.870 libras al año. Un aumento salarial del 4% significaría para ellos unas 500 libras más al año después de impuestos.