Londres, la ciudad cosmopolita por excelencia de Europa, se rige como uno de los destinos clave para millones de turistas al año. Esta polifacética y vertiginosa urbe atrae a sus múltiples visitantes por sus magníficos monumentos y su estupenda oferta de ocio y turismo. Y es que pocas ciudades le ganan a Londres en cuanto a diversión y tiempo libre se refiere.
Sin embargo, Londres como siempre va un paso más allá. Y es que da la sensación de que esta metrópoli tiene la intención de no dejar indiferente a nadie que pise firme por sus calles. Conformarse con la superficialidad de la ciudad es un error que muchos cometen, y es que como si se tratase de una persona en sí, la ciudad tiene mucho más escondido en su interior que en aquello que es palpable.
Rincones ocultos de Londres
Existe una amplia lista de rincones ocultos y desconocidos capaces de dejar atónitos a aquellos que tienen la oportunidad de conocerlos. Aquí destacamos algunos de ellos:
Wilton´s Music Hall
El Wilton´s Music Hall posee el honor de ser la sala de conciertos más antigua del mundo. Es, sin duda, una de esas joyas londinenses que poca gente conoce pero que sin duda merece la pena visitar. Situado junto a Cable Street, a tan sólo 10 minutos andando de la estación de metro de Tower Hill, el Wilton´s comenzó su historia como una cervecería que servía a los capitanes de marina escandinavos y a los mercantes adinerados que vivían en la zona en el año 1740.
Desde 1826 se le conoció como el Bar Mahogany y años más tarde se construyó una sala de conciertos detrás del bar, a la cual se le conoció como The Albion Saloon. En 1850, John Wilton, a quién la sala le debe su nombre, compró el negocio y lo convirtió en el mejor teatro de la época. Por desgracia, a finales del siglo XIX un incendio arrasó por completo el teatro.
Durante los últimos años y gracias a una campaña apoyada por escritores, músicos, poetas y demás personalidades del mundo de las artes, el Wilton´s Music Hall se salvó de una demolición y se comenzó a invertir en su restauración. En la actualidad, la segunda fase de las obras está en marcha y se prevé que termine este mismo año.
El túnel de Leake Street
Dirigiéndonos a una zona más céntrica de la ciudad, nos encontramos con la popular estación de Waterloo y lo que cerca de ella se encuentra escondido a los ojos más distraídos: el túnel de Leake Street. Este túnel de 300 metros hacia ninguna parte fue ‘adoptado’ por el artista callejero Banksy en el año 2008, dejando allí no sólo sus imponentes grafitis, sino que organizó el famoso Cans Festival, invitando a todo el mundo a dejar su huella en este túnel bajo las vías de Waterloo.
De esta forma, según el propio Bansky “se transformó un oscuro y olvidado pozo inmundo en un oasis de arte”. Desde entonces sus muros, luces, puertas y vallas cambian constantemente sin dejar apenas un sólo rincón sin pintar. El lugar es considerado un icono del panorama underground y es a menudo usado por fotógrafos como fondo urbano, pero no forma parte de las rutas turísticas a pesar de encontrarse a tiro de piedra del mismísimo London Eye. Su entrada, desde luego, no invita al visitante a adentrarse en sus entrañas, pero una vez vencido el miedo inicial, es una experiencia de la que no te arrepientes. Como un buen amigo dijo “es uno de esos lugares tan feos como fotogénicos”.
El templo hindú de Londres
Al noroeste de Londres se encuentra el BAPS Shri Swaminarayan Mandir, un magnífico templo hindú también conocido como Neasden Temple. Entre sus curiosidades, destaca que el Neasden Temple fue nombrado como el templo hindú más grande del mundo fuera de la India en el año 2000, además de ser el primer templo auténtico y tradicional hindú de Europa, puesto que se construyó utilizando exclusivamente materiales y métodos tradicionales gracias a miles de voluntarios que colaboraron en su construcción.
El templo de Neasden es un rincón secreto de Londres, ya que al estar localizado fuera de la capital británica no suele encontrarse en las guías, tanto es así, que incluso muchos londinenses ignoran su existencia.
Curiosidades de Londres
Londres es una ciudad en la que puedes encontrar de todo. Puedes pasear por algunas de las calles más famosas del mundo y conocer alguna de las tiendas de lujo más conocidas, y al mismo tiempo, a tan sólo 20 minutos, te puedes codear con lo más alternativo de la ciudad y descubrir lo último en arte urbano o perderte por numerosos mercadillos vintage. Pero lo que igual nunca pensaste que podrías ver es un puente enrollable o narices escondidas a lo largo de la ciudad.
Rolling Bridge
A simple vista, el Rolling Bridge no es más que una sencilla pasarela de acero y madera sobre uno de los canales situados al norte de Paddington. Pero en realidad se trata de, probablemente, el puente más original de Londres. Para descubrir su peculiaridad es necesario verlo un viernes a las 12 del mediodía que es la hora exacta en que el puente se enrolla de manera automática, encogiéndose en un octógono perfecto que nada tiene que ver con un puente.
Las narices de Londres
Por su parte, Londres tiene incluso su propia nariz, que se encuentra bajo uno de los arcos del Admiralty Arch, que comunica Trafalgar Square con The Mall, el camino que lleva hasta el Palacio de Buckingham. Pero esta no es la única nariz de Londres, al parecer, hay unas cuantas más distribuidas por la zona céntrica de Soho.
Son obra del escultor Rick Buckley, que en 1997 decidió decorar Londres con moldes de su nariz, repartiendo más de 30 por los principales lugares turísticos como muestra de repulsa al creciente número de cámaras CCTV distribuidas por la ciudad. Actualmente ya quedan menos narices en Londres, y según la leyenda, el que encuentre las 7 narices de Soho conseguirá riqueza infinita. Como punto de partida puedo revelar que hay una junto al Milk Bar en Bateman Street y otra en Meard Street, pero hasta ahí puedo leer.
Un faro en mitad de Londres
Londres es un mundo dentro de otro mundo, y es por eso mismo que podemos encontrar un faro en mitad de Londres. El único faro de la metrópoli se ubica en uno de los lugares más históricos de los Docklands, la conocida zona de Trinity Buoy Wharf. Actualmente el faro no funciona y desde el año 1998 es un lugar dedicado al arte y a las actividades culturales.
Una canción de 1.000 años
Cerca de la zona también se encuentra el Longplayer, una composición musical que empezó en el año 2000 y terminará a finales de 2999, es decir, estará sonando 1.000 años sin repetirse. El instrumento compuesto de muchos boles metálicos emite diversos sonidos mientras que un ordenador se encarga de materializar dichas notas musicales.
El gobierno de Londres entiende esta captación sonora como un experimento social ya que depende de la propia gente y la comunicación entre ella que la canción siga sonando durante 1000 años en un futuro que se desconoce.
Las pocas lidos de Londres
Para finalizar este viaje recóndito por la ciudad y ahora que por fin el verano está empezando a llegar a Londres, decir que a día de hoy sólo quedan 18 lido –palabra italiana con la que se conoce en Londres a las piscinas públicas– que no parecen muchas teniendo en cuenta que la ciudad cuenta con una población de alrededor de 9 millones de habitantes.
Así que si tenéis una buena ocasión para pegaros un chapuzón refrescante no dudéis en visitar la Brockwell Lido, también conocida como la ‘playa de Brixton’, Serpentine Lido en pleno Hyde Park y Tooting Bec Lido, la más antigua de las lidos que permanecen abiertas en la actualidad.
muy bonito me a gustado, gracias por compartirlo. un besazo
HOLA, MUCHAS GRACIAS POR TODA LA INFORMACION QUE COMPARTEN. ME PARECEN FANTASTICAS LAS NOTAS Y CADA VEZ CONOZCO UN POCO MAS DE ESTA CIUDAD QUE ME FASCINA Y LA QUE VOLVERE A VISITAR FIN DE OCTUBRE POR TERCERA VEZ. ME ENCANTA LA NOTA HOY PUBLICADA SOBRE LUGARES CASI DESCONOCIDOS PERO QUE INDUDABLEMENTE SON PARTE DE LA CIUDAD. SALUDOS Y ME ENCANTA SU PUBLICACION.