Los elevados costes de energía en el que deben incurrir las fábricas, en Reino Unido, ha llevado a muchos empresarios a considerar el cierre.
Mientras las facturas de electricidad y gas siguen aumentado, muchas fábricas del país enfrentan un cierre temporal o definitivo.
Suben los costes de energía, baja la rentabilidad
Para muchos fabricantes los costes de energía no son sostenibles, debido a su incremento desmesurado. Las facturas de gas y de electricidad siguen aumentando, mientras se acerca el invierno.
Kwasi Kwarteng, secretario de Comercio británico, sostuvo conversaciones con dueños de fábricas que necesitan mucha energía. Según los representantes del sector, los costos de la energía eléctrica se han quintuplicado. Muchos de ellos se ven abocados al inminente cierre de las fábricas durante la navidad; el argumento es que se espera una baja rentabilidad durante la temporada de diciembre.
Sectores que se verían afectados con la paralización de producción
La paralización productiva abarcaría muchos sectores de bienes y servicios. Por ejemplo, se dejaría de producir ropa, vidrio, cemento, cal y químicos, entre otros rubros.
El cierre de las fábricas de papel afectaría gravemente a todos aquellos sectores que necesitan papel para su producción. Esto implicaría, además, un incremento en los precios de estos productos.
Para Andrew Large, director general de la CIP, la crisis en esta área productiva provocaría cierres en muchas otras industrias.
Para Large, en su encuentro con el secretario de Estado se expuso claramente el riesgo de cierre; señala que los altos costos de energía asumidos no son sostenibles.
Fábricas de acero enfrentan cierre definitivo
Uno de las situaciones críticas es la de las fábricas de acero en Reino Unido. Según el representante de UK Steel, Gareth Stace, este sector industrial no ha recibido apoyo gubernamental para enfrentar esta situación.
Lo grave, en este caso, es que no volverían a abrir. Si para algunos el cierre será temporal, para el acero sería definitivo. Según Stace, cuando una industria de acero se para, ya no hay cómo recuperarla.
Señala, además, que otros países europeos han hecho fuertes inversiones para cubrir la demanda a corto plazo. Sentencia lo inconcebible que sería ver al mercado interno británico surtido con importaciones, porque las fábricas nacionales no pueden producir.
Perspectivas a corto plazo
Según analistas, uno de los riesgos, es que los costos por facturas de energía de los fabricantes sean transferidos a los consumidores. Asimismo, las familias británicas podrían tener que pagar elevados costos de energía, a partir del año próximo.
Este fenómeno crecería gradualmente, desde los eslabones de las cadenas de suministros (debido a los elevados costos de fabricación), hasta el consumidor final. Para Ed Miliband, secretario de Negocios, se requiere planificación gubernamental para detener la crisis, antes de que se profundice.