La banda más mítica del rock español, Los Suaves, está en sus últimos coletazos. Tras 35 años de carrera y vida dedicada al rock ‘n’ roll, la banda auriense se encuentra en una intensísima y emotiva gira de despedida, La Música Termina. En esta última gira, que lleva desde finales de marzo y con fecha de fin aún desconocida, los gallegos no han querido olvidarse de sus fans de Londres y Edimburgo, las dos actuaciones que han tenido lugar este fin de semana.
Hemos tenido el placer de pasar un rato con ellos y de presenciar en primera persona la emoción que la banda de Ourense provoca entre sus fans, incluso los más jóvenes, especialmente ahora que se retiran. La gente no paró de cantar en Londres junto a Los Suaves canciones tan legendarias como «Dolores se llamaba Lola», «No puedo dejar el rock» o «Cuando los sueños se van».
Con la sala considerablemente llena y despertando el interés de numerosos medios nacionales y regionales, los reyes del rock español dieron una conmovedora despedida a la capital británica, traídos por Sonido Clandestino . Sin embargo, a pesar de que se respira en ellos la tristeza del fin de algo grande y de toda una vida, son los primeros en bromear sobre sí mismos y explican con naturalidad lo necesario que es que esta etapa llegue a su fin.
¿Cómo se queda el rock español sin Los Suaves?
Ya tenían que haber algunos grupos que nos echaran a patadas, en el buen sentido. Está Rosendo, que ya está bien, Barricada se han separado… Pero tiene que venir más gente. Y no viene gente porque no hay sellos discográficos, los medios de comunicación están permanentemente sacando sólo a los grandes. Antes te dejaban sacar varios discos, ahora sólo puedes acertar con el primero y todo se le pone demasiado complicado a la gente que quiere hacer algo. Desvían la atención porque quieren a una sociedad desinformada e ignorante y un pueblo sin cultura, que no se haga preguntas, muere. Lo que quieren es tenernos embrutecidos y fácilmente «llevables».
¿Qué ocurre entonces con la cultura?
El problema de la cultura es que se está perdiendo. Cultura también es música y la música hace que socialices con la gente. Yo (Charly) hice amigos en las tiendas de discos sólo comentándolos y eso se ha perdido. Es el lenguaje común mundial y está latente en la vida de todas las personas, nadie vive sin música. Un español y un japonés escuchando ACDC se entienden perfectamente sólo mirándose y moviendo la cabeza. Las canciones tienen letras que te hacen pensar, te emocionan, te hacen llorar o te llenan de alegría. La constitución dice que todo el mundo tiene derecho a una vivienda digna, sanidad pública y también tiene derecho a la cultura y para eso es para lo que yo pago mis impuestos. Me es igual que sean fados, que pop, que folk, libros, fotografías… Para ellos no pago mis impuestos y viven de mí.
Los Suaves, cortesía La Central de Comunicación.¿Qué opináis de que el alcalde de Londres haya elaborado un plan de rescate para las salas populares de música en vivo de la ciudad?
Pues que este alcalde entendió que un pueblo con cultura se hace más grande. Y ése es el mérito, que en realidad más que mérito es su obligación, pero visto lo visto y el entorno… Es imprescindible para los pueblos la cultura porque te hace ser mejor persona. En este caso han empleado el presupuesto además de en otras necesidades, en que no desaparezca la cultura. En Orense ya sólo queda una tienda de discos y vende de todo. En Londres la música llegó a ser la segunda industria en los 60 y los 70 y eso es la leche. Probablemente ahora sea el fútbol.
¿Hay fecha de despedida definitiva?
Sólo las fechas oficiales, pero algo continuaremos en 2016 y Ourense es nuestra ciudad, nuestro sentido común nos dice que acabaremos allí. Pero nadie sabe qué día del año que viene. Y si surge algo más, también lo haremos, nosotros somos una banda de directo, pero lo que no vamos a hacer es sacar discos y prolongar el adiós.
¿Cómo ha sido para vosotros el homenaje de Orense y que pongan a una plaza vuestro nombre?
Nos dieron una medalla y el nombre de la plaza y fue muy emotivo porque fueron los vecinos. La plaza tenía un nombre precioso, que era La Plaza de Las Flores y los vecinos estuvieron encantados de cambiar el nombre, entonces que fuera el pueblo nos hace sentir muy orgullosos. Nos sentimos más de nuestra tierra, que es nuestra esencia.
¿Cómo es para vosotros la despedida? Si no fuera por el estado de salud de Yosi, ¿sería vuestra voluntad continuar?
[pullquote]»Más que poner la palabra fin, en realidad debíamos poner ¡Por Fin!», bromea Charly. «La gente sigue apasionada, pero ya toca».[/pullquote]No, no, el motivo no es ese para nada. Yosi, de hecho, es el que más ilusión tiene. Pero, ¿Qué vamos a echar, dos años más? Yo lo digo con letras canon, con ellas más que poner la palabra fin, en realidad debíamos poner “Por Fin”. Es una cuestión de dignidad. La gente sigue apasionada y la cara de la gente es para verla, yo me emociono, pero ya toca. Hemos tocado algunos años 12 conciertos y otros ininterrumpidamente y la gira es tan larga porque somos una banda de carretera, aunque haya que hacer discos y entrevistas. De hecho nosotros existimos porque existe el directo y es nuestro patrimonio.
¿Cómo seguirá siendo la vida rock ‘n’ roll para vosotros?
Los Suaves terminan, pero no dejas de escuchar y apasionarte con la música y tu entorno, porque la música es parte vital de nuestra vida. La gente que conocemos es porque nos gustaba esa música. Si a uno le gustara la salsa, tendría otra forma de pensar, le gustaría otra forma de humor… Te marca la música porque la compartes con determinadas personas que te van formando. Y ese es nuestro entorno, pero Los Suaves tenemos que cerrar esta etapa y no pasa nada, nos moveremos en el recuerdo y la nostalgia, que también es bonito. Yo seguiré en la música, toco la batería en Ourense en un grupo, tengo un programa de radio en la gallega y estaré metido en ello siempre, permanentemente.
Fotografía cortesía de Manu Cabaleiro.