El estudio de arquitectura Foster & Partners presenta su proyecto para construir el que será el edificio de viviendas más alto de Londres. Será un rascacielos de 73 plantas que se levantará en la zona de «The Isle of dogs», una antigua isla natural situada sobre el Támesis que ha sido unida artificialmente a su ribera en el distrito de Canary Wharf.
El proyecto de Foster, conocido como The South Quay Plaza, incluye además otro edificio de viviendas, este con 36 plantas, un pequeño centro comercial, dos edificios de oficinas y un complejo de ocio e instalaciones deportivas. Según los planos, entre los dos bloques de viviendas sumarán un total de más de 900 apartamentos.
Este nuevo proyecto llega en medio del debate sobre la promoción y permisividad para desarrollar de este tipo de edificaciones por parte del alcalde Boris Johnson, siguiendo la misma línea de su predecesor Ken Livingstone, y que ya le ha ocasionado numerosas críticas por parte de la prensa, la oposición y las asociaciones de vecinos.
Como ya se publicó hace unos días, en Londres existen proyectos para levantar más de 236 nuevos rascacielos. Estas construcciones suponen una ruptura con el urbanismo tradicional de la ciudad, caracterizado por las casas bajas. La polémica está servida.
