El aeropuerto con mayor tráfico de toda Europa, el aeródromo de Londres Heathrow, también está preparándose para la llegada masiva de viajeros que se espera de cara a los Juegos Olímpicos. Si días atrás la imagen del caos planeaba sobre estas instalaciones, dada la amenaza de huelga de los trabajadores de los servicios de inmigración, ahora desde el aeropuerto proyectan organización. Así lo mostró el director de las autoridades de inmigración en Heathrow, Marc Owen, quien en rueda de prensa aseguró que cientos de agentes extra, plenamente capacitados, se incorporarán para reforzar la plantilla.
Owen insistió en que la situación estará controlada, pues «Heathrow ha gastado más de 20 millones de libras esterlinas –al cambio, unos 25 millones de euros- en prepararse para recibir el incremento de pasajeros y atender especialmente a los atletas» durante la gran cita mundial del deporte. Las autoridades han insistido en que los millares de visitantes «no sufran por problemas en los puestos de inmigración y fronteras del Reino Unido», apuntó Owen a la BBC.
Está previsto que el día de mayor actividad será el próximo 13 de agosto; jornada posterior a la ceremonia de clausura los Juegos. Este aeropuerto londinense calcula que gestionará 137.800 pasajeros de salida y unas 200.000 maletas, en vez del promedio de 150.000 que procesa en un día normal.
Además, Heathrow está construyendo una terminal especial para los atletas que parten de los Juegos Olímpicos. La terminal contará con siete carriles de seguridad y 31 mostradores de facturación.