Los trabajadores del metro de Londres han anunciado una huelga para el domingo 8 de enero a las 18.00 de la tarde hasta el lunes 9 a la misma hora. Esta parada afecta prácticamente a todas las líneas de metro y supone retenciones y aglomeraciones de pasajeros en los andenes. El área más afectada de Londres será la zona 1 y se ha anunciado a los pasajeros que algunas paradas centrales como Paddington, London Bridge Victoria, King’s Cross, Euston y Waterloo tendrán pocos o ningún tren. A la huelga del pasado diciembre del metro de Londres, se suma ahora otro parón que afectará a todos los viajeros del transporte público.
Por esta razón, también se espera que los viajeros usen los autobuses para moverse por la ciudad, por lo que estarán más llenos que de costumbre.
Los motivos de la huelga del metro de Londres
Los trabajadores del servicio de metro en Londres inician así la huelga como forma de protesta por la constante pérdida de empleos y el cierre de oficinas de venta de billetes por la apertura de máquinas expendedoras. Los recortes en el servicio de transporte fueron iniciador en la pasada legislatura, liderada por el ex alcalde de Londres y actual Secretario de Exteriores, Boris Johnson.
En las negociaciones de días pasados entre los sindicatos y la patronal no se ha alcanzado ningún acuerdo y están a la espera de terminar esta tarde para ver si ambos lados se ponen de acuerdo.
El líder del sindicato de transportes RMT, Mick Cash, ha dicho que, aunque esperan que la dirección del Metro de Londres llegue con un conjunto de mejoras que solucionen los problemas del desempleo y las malas condiciones laborales y así no tenga que haber huelga, los preparativos del parón del domingo y el lunes continúan.
El otro sindicato que también está dentro de las negociaciones, el TSSA, también se muestra abierto a nuevas conversaciones para evitar la huelga del metro. Su secretario general, Manuel Cortes, ha dicho que el equipo de negociación estará disponible todo el fin de semana si es necesario para llegar a un acuerdo.
Desde el Metro de Londres, el jefe de operaciones, Steve Griffiths ha dicho: «Está claro que algunas estaciones necesitan más personal. Hemos empezado a contratar a gente y continuaremos trabajando con los sindicatos para implantar las recomendaciones hechas en la revisión.»