Parece ser que no se han puesto de acuerdo ni siquiera con la mediación del ministerio de Fomento entre la dirección de Iberia y los pilotos. El sindicato Sepla ha convocado huelga para todos los lunes y viernes desde el 9 de abril hasta el 20 de julio debido al «boicot que ha ejercido Iberia sobre el proceso que ha impedido conseguir un acuerdo a pesar de las importantes concesiones ofrecidas por Sepla», afirman los pilotos en un comunicado. Y es que, la creación de la filial, Iberia Express, ha levantado ampollas entre los trabajadores de la aerolínea española.
Según el sindicato, la filial es una «empresa ilegal que vulnera los pactos de convenio», ya que segrega la actividad de la empresa matriz, hecho que habían acordado no hacer.
«La compañía tiene previsto traspasar 40 aviones de la matriz a la nueva filial, lo que significará la eliminación de 8.000 puestos de trabajo», afirmaban desde Sepla antes de darse cuenta de que British Airways, fusionada con Iberia, podrá operar en Barajas sin ningún tipo de restricción.
En un comunicado, el sindicato propuso que los pilotos de Iberia volasen en la filial, con las condiciones determinadas por ellos, sin embargo, la empresa rechazó el plan.