Si nos fijamos en el panorama europeo, los mercados siguen ofreciendo muchas dudas porque la zona euro sigue muy nublada. España anda revuelta y le costará salir de la crisis más que a otras economías. EEUU, por su parte, ha conseguido grandes logros gracias a Obama, como la reforma sanitaria, pero sigue con un déficit peligrosísimo que levanta miradas recelosas.
En definitivas cuentas, los países que hasta ahora tiraban del carro de la economía mundial, han dejado las primeras posiciones a otra potencias como India, China o Brasil, que vienen empujando fuerte en el mercado globalizado. En este punto, las empresas buscan cada vez más, candidatos con opciones a preparar las maletas y a anclar en esas remotas tierras para hacer negocios. He ahí la oportunidad para aquellos que se lo han currado durante varios años, viajando, empapándose de culturas y aprendiendo idiomas.
Las compañías se fijan ahora en directivos y empleados que sean capaces de abrir mercado en países emergentes y que tengan una fácil capacidad de adaptación. Por ello es muy importante la salida a otros países, ya que las oportunidades a la hora de buscar trabajo se multiplican. Lo que ahora puede suponer un esfuerzo titánico -salir al extranjero por la falta de oportunidades- puede suponer, el día de mañana, una experiencia de incalculable valor, en términos de carta de presentación y experiencia adquirida. En este sentido, debemos estar preparados para la realidad que se avecina: según un estudio publicado por el prestigioso diario The Economist, un 40% de las compañías mundiales aumentará el número de extranjeros en los próximos cinco años. Aunque China será uno de los mercados más demandados, no será indispensable hablar mandarín; hablando un correcto inglés será suficiente.
He aquí otra de las ventajas que deja la tormentosa crisis económica: si has luchado fuerte en estos últimos años, si has aprendido un inglés aceptable y tienes un pasado con una carrera universitaria, no todo está perdido. Las oportunidades están ahí fuera, a la vuelta de la esquina. Sólo hay que tener un poco de paciencia y tener el coraje para aplicar a esos destinos tan paradisíacos, aunque asusten al mismo tiempo. Las empresas buscan personal con idiomas y tener vocación global en estos días es algo indispensable para la nueva hornada generacional que ha crecido al paso de la crisis. Aprender otras lenguas, aparte del inglés, también es algo que recomiendan muchas empresas y asesores empresariales: el portugués sigue al alza, siendo cada vez más demandado por las empresas… Se busca gente con idiomas en las empresas….