La familia de la cantante ha puesto en venta la casa en Londres donde murió el pasado 23 de julio de 2011. Según el periódico británico The Guardian, la familia no ve como algo apropiado vivir en ese domicilio, ya que se ha convertido en lugar de peregrinación de miles de fans.
Diez meses después de la muerte de la cantante, la propiedad, sale a la venta por 2,7 millones de libras (3,4 millones de euros). La familia de la artista aseguró que no es nada práctico que esté vacía y seguir manteniendo los gastos que conlleva.
Además, se ha rumoreado que la casa, situada en el Candem Town, al norte del centro de Londres, iba a ser la sede de una fundación benéfica que apoyara causas en las que creía Amy Winehouse, pero los gastos de mantenimiento han sido una causa mayor para que no sea así. «Alguna familia será feliz allí», han asegurado fuentes de la familia, que recuerdan que Winehouse adoraba su vivienda.
La propiedad, en la que fue hallada la cantante de 27 años, solo había cambiado de manos una vez en 40 años. Tiene una reforma reciente a sus espaldas, consta de tres dormitorios dobles, tres salas de estar y jardines. La considerada diva del soul, que batalló durante años contra su adicción a la bebida y a los estupefacientes, tenía un patrimonio valorado al morir en 4,2 millones de libras (unos 5 millones de euros).
