Once millones de libras es lo que ha pagado el fabricante de automóviles Geely para comprar la empresa Manganese Bronze, fabricante de los ya míticos taxis negros que recorren las calles de Londres.
Manganese Bronze responsable desde 1948 de la fabricación de los cabs, ha perdido desde octubre a 300 de sus trabajadores. La empresa, que no conseguía ganancias desde 2007, se ha visto obligada a vender a Geely la totalidad de sus acciones. Anteriormente ya poseía un cuarto de la empresa.
El Director de Asia de la consultora LMC Automotive, John Zeng, ha declarado que la mejor opción para Geely es trasladar la línea de producción a China, rebajar los costes y que vuelvan a traer los taxis a Londres para su venta.
El alcalde de la capital, Boris Johnson, ha dicho que está “encantado” con la adquisición de Geely y que espera oír propuestas pronto para “la producción de un bajo nivel de emisiones”.