La decimotercera jornada deja aún más patente el bipolio al que está condenado la Liga BBVA. Barcelona y Atlético aprovecharon el naufragio del Real Madrid en el Benito Villamarín para poner más tierra de por medio con el resto de la tabla, afirmando de nuevo que la Liga vuelve a ser -o siempre ha sido- cosa de dos.
La derrota del Real Madrid ante el Betis (0-1) parece cambiar el supuesto guión prescrito. Obligado a complicarle la vida al Barcelona, el equipo de José Mourinho parece haber olvidado su rol y volvió a dejarse tres puntos que pueden haber finiquitado su particular liga en noviembre; los 11 de distancia que los separan ya de la cabeza pintan insalvables. El testigo lo ha cogido firmemente el Atlético, que hace valer su candidatura con goleadas en el Calderón; esta vez la víctima fue un impasible Sevilla, el cual vio cómo el equipo de Simeone les pasaba por encima, obligándoles a recoger cuatro balones desde la red. Así, los de Vilanova siguen líderes en solitario y continúan sin conocer la derrota. Con un Messi que ya cuenta con 19 goles como bagaje, los azulgranas dejan a su paso una estela que, por el momento, solo los colchoneros son capaces de seguir.
En cuanto al Málaga, el conjunto andaluz comienza a dar brillo a la cuarta plaza de la clasificación tras una contundente victoria ante el Valencia (4-0). Pellegrini batió a Pellegrino, cuyos resultados en Liga no están siendo tan satisfactorios como en Champions. La exigente competitivad de los puestos europeos está haciendo mella en el conjunto ché, demasiado acostumbrado a la placidez de la tercera plaza en las últimas ediciones del campeonato.
Más alejados de la cabeza se encuentran Betis y Levante, los cuales ocupan plaza de Europa League por méritos propios. Mel está sacando jugo a su buena predisposición táctica y los siete partidos ganados no son casualidad. El conjunto granota, por su parte, no pierde la cabezonería del año pasado y pese a caer ante el Barcelona (0-4), mantiene un espíritu de equipo que supera al cansancio de disputar dos competiciones.
Ya en la zona baja de la tabla, Granada, Osasuna y Espanyol se reparten los farolillos rojos. La cúpula del conjunto perico se ha visto obligada a destituir a Maurucio Pochettino tras un nefasto inicio de temporada en el que tan solo ha conseguido dos victorias. El último varapalo ante el Getafe (0-2) gastó el último cartucho y el técnico dice adiós a la que ha sido su casa desde 2009. Por otro lado, Osasuna no está consiguiendo con resultados lo que sí consigue en juego, y no logró pasar del empate en un emocionante derbi ante la Real Sociedad (0-0).
El último duelo de la jornada protagonizado por Zaragoza y Celta se saldó en victoria para los gallegos y permite a ambos conjuntos asentarse en la mitad de la tabla.