La peor tormenta del último siglo paralizó los transportes y dejó sin electricidad a miles de personas. Gales fue una de las áreas más afectadas, con vientos de 165 millas por hora, doblando las predicciones de los meteorólogos. No en vano, la tormenta fue la peor que azotó Gran Bretaña desde marzo de 1986.
Lo peor llegó al norte de Inglaterra y Escocia, donde la policía tuvo que cerrar los puentes más importantes. Asimismo, miles de personas se quedaron sin electricidad y los colegios de Escocia cerraron a la hora de comer, para dejar a los niños sanos y salvos en sus casas. Desde la compañía ScottishPower afirman que había más de 600 ingenieros intentando restablecer la electricidad. Esto era especialmente importante en algunos casos, como los hospitales que fueron forzados a usar los generadores y evacuar a algunos de sus pacientes.
Los vientos eran tan fuertes que el motor de una turbina eólica prendió en llamas dejando ennegrecidas sus hojas a causa del humo.
Cumbria fue también víctima de fuertes lluvias que dejaron a algunos motoristas estancados en varias inundaciones.
Problemas en los transportes
Pasajeros de un vuelo de Easyjet desde Bristol vivieron momentos de auténtica pesadilla al ver como el avión en el que viajaban era azotado por fuertes vientos. Una de las alas del aparato chocó en la pista de aterrizaje durante el descenso en el aeropuerto de Edimburgo.
Katie, Harries, una testigo, afirma: «La rueda derecha primero rozó el suelo y luego rebotó». Asimismo, añade: «El avión que intentó entrar momentos antes que éste fue peor. Iba completamente de lado en el momento del descenso y tuvo que cancelar el aterrizaje.»
Por otra parte, los pasajeros a bordo del crucero party cruise, proveniente de Southampton, no pudieron desembarcar en Francia después de que vientos con velocidades de 60 millas por hora azotaran el puerto. El lujoso barco que llevaba casi 2.400 pasajeros, tuvo que buscar refugio para los pasajeros en la costa.
Por otra parte, en la carretera, estuvieron estancados varios vehículos y dos hombres tuvieron que ser rescatados de las inundaciones con síntomas de hipotermia.