El número de pubs ingleses es el más bajo que ha habido nunca. La conclusión ha surgido gracias a un análisis que muestra el impacto de la pandemia y el aumento de los costes de negocio. En los primeros seis meses de 2022 el número total de pubs cayó por debajo de los 40.000. Esto ha provocado un descenso de más de 7.000 en comparación con hace una década. Los pubs que han desaparecido han sido demolidos o convertidos en otros edificios, como viviendas u oficinas, según la investigación de los asesores inmobiliarios Altus Group.
Los pubs ingleses se enfrentan a los peores retos
El sector de la hostelería se ha enfrentado a grandes retos en los dos últimos años mientras se recuperaba de la pandemia. El Covid-19 provocó cierres a nivel nacional y redujo la demanda que había en los bares. Sin embargo, los investigadores afirman que, aunque los bares lograron superar la crisis causada por el Covid-19, ahora se enfrentan a un nuevo reto debido a la inflación y a la crisis del coste de vida.
«Aunque los pubs demostraron una notable resistencia durante la pandemia, ahora se enfrentan a nuevos retos por la crisis de los costes. Esta crisis se debe al aumento de los costes energéticos, las presiones inflacionistas y las subidas de impuestos«, afirma Robert Hayton, presidente de Altus Group en el Reino Unido.
Desde finales de 2021 hasta finales de junio de este año han desaparecido 200 pubs de las comunidades inglesas y galesas. La mayor caída se produjo en West Midlands, donde cerraron 28 en solo medio año, seguido de los locales Londres y del este de Inglaterra, que ambos perdieron 24 bares.
Según un estudio de la British Beer and Pub Association (BBPA), el British Institute of Innkeeping y UK Hospitality, solo el 37% de los negocios de hostelería obtienen beneficios. El aumento del coste de la energía, los productos y la mano de obra son los principales factores que explican el descenso de los beneficios.
La hostelería pide ayuda al Gobierno
El sector de la hostelería ha pedido al Gobierno que le preste más ayudas ya que la población está reduciendo su consumo fuera de casa. Además, en junio se sumó la huelga ferroviaria, lo que provocó que las personas disminuyesen sus salidas. Un ejemplo es Clive Watson, cofundador de City Pub Group en Londres, que dijo en junio que podría haber perdido hasta un 25% de las ventas habituales. Esto se debió a que la huelga en el metro llevó a la gente, entre otras cosas, a cancelar sus salidas.
Por otro lado, Emma McClarkin, directora ejecutiva de la BBPA, declaró: «Cuando los bares se ven obligados a cerrar es una pérdida enorme para una comunidad local. Las cifras muestran un cuadro devastador de cómo se están perdiendo bares en pueblos y ciudades de todo el país». «Es esencial que recibamos un alivio para aliviar estas presiones o realmente nos arriesgamos a perder más bares año tras año», afirmó McClarkin.