Fernández de Kirchner califica de «estupidez» la actitud del Gobierno de Cameron.
El debate sobre la autodeterminación de las Malvinas, está causando un duro enfrentamiento en las relaciones internacionales entre Argentina y Reino Unido. La presidenta Kirchner salía al paso de las declaraciones de David Camerón, que anteayer afirmaba que no debatiría sobre la autodeterminación «mientras las Malvinas quieran ser territorio soberano británico», sentenciando que Gran Bretaña era «una burda potencia colonial en decadencia», y rechazaba el punto de vista de Cameron, calificándolo de ser un gesto «mediocre y casi de estupidez», como recoge la cadena de televisión BBC.
Este enfrentamiento se produce casi 30 años después de la guerra que enfrentó a argentinos y británicos por este territorio situado en el sur del Atlántico. Este aniversario y la cercanía de las elecciones presidenciales en Argentina, son una de las causas, según los analistas, del aumento del nacionalismo en los discursos de Kirchner, que le podría ayudar a permanecer en la Casa Rosada si decidiera buscar la reelección.
La visita del Secretario General de la ONU, Ban Ki-Moon, al país latinoamericano sirvió para que el Gobierno de Buenos Aires reclamara la soberanía del archipiélago, hecho que fue reconocido por la Organización de Naciones Unidas, pero a la vez, reconoció que Argentina no «podía forzar a Londres a entrar en negociaciones». La posición de los anteriores gobiernos británicos y el actual siempre ha sido la misma, no hablar de la soberanía a no ser que los residentes expresaran ese deseo.