El número de visitantes de las principales atracciones del Reino Unido sigue siendo casi una cuarta parte menos que antes de la pandemia. Esto se debe, según la Association of Leading Visitor Attractions, al covid, el Brexit, los precios de la energía y la crisis financiera.
Si bien el número de visitantes aumentó un 69% en 2022 en comparación con el año anterior, todavía fue un 25% inferior al de 2019. Bernard Donoghue, director de la organización, describió el aumento anual como «probablemente tan bueno como podríamos esperar».
«Nunca nos habíamos visto afectados por tantas variables, que están completamente fuera de nuestro control. Todas están sucediendo al mismo tiempo», declaró a The Guardian. «No solo ha sido el covid, sino también la crisis del coste de vida, los costes energéticos y la resaca del Brexit«. Y añadió: “Sigue siendo notable que nuestros visitantes sigan creciendo, prosperando a diario, a pesar de todo esto”.
Londres registra el mayor aumento medio de visitantes a sus atracciones
Aunque algunas atracciones como las gratis y las de Londres, han registrado un fuerte crecimiento, el panorama fue desigual en el resto del Reino Unido. Londres registró el mayor crecimiento medio, con un aumento de las visitas del 152%. Mientras, en Escocia fue del 128% y en Irlanda del Norte del 120%, respecto a 2021.
La atracción de interior más visitada y la segunda más visitada en general (después del Windsor Great Park) fue el Museo de Historia Natural, que experimentó un aumento del 196% de visitantes hasta alcanzar los 4,6 millones en 2022. El Museo Británico, con un aumento del 209% y 4,1 millones de visitantes, pasó del sexto al tercer puesto.
La continua escasez en Londres de visitantes de China y Extremo Oriente, ha sido un reto importante en 2022, señaló Donoghue. Añadió que las atracciones de pago y las situadas fuera de los centros urbanos se han visto afectadas por los precios de la gasolina y la crisis financiera general. «Cuando el precio de la gasolina era un problema real, a los centros urbanos les iba bien, porque podían contar con el transporte público. Los lugares remotos se veían afectados porque la gente decía: «La verdad es que me va a costar bastante dinero ir en coche'», dijo Donoghue.
El Comisario aceptó la prórroga de la desgravación fiscal para museos en el presupuesto de esta semana. Pero pidió al Gobierno un mayor apoyo con los costes energéticos, una bajada del IVA para las atracciones y un renovado impulso comercial para los turistas extranjeros.