El pasado día 9 de enero el Metro de Londres celebró su 150 aniversario. El primer trayecto que hizo el popular Tube tuvo lugar entre las estaciones de Paddington y Farringdon, con la línea Metropolitana de ferrocarriles.
Aprovechando esta festividad, el metro de Londres, en colaboración con el Museo de Transporte de la ciudad, tiene previsto celebrar varios eventos en relación a dicha efeméride durante el 2013. Las actividades explorarán la historia del Tube y prestarán especial atención al papel que jugará en el futuro, tanto en la vida de los londinenses como en la economía de la ciudad y del Reino Unido.
Una de las actividades que generó más expectación tuvo lugar el pasado día 13 cuando los pasajeros pudieron ver de cerca la restaurada locomotora Locomotive NO.1., la última en haber sido construido por la Metropolitan Railway y que tiraba del vagón NO. 353, el más antiguo que se mantuvo en activo y que ha sido restaurado para esta ocasión tan especial.
El metro juega una función transcendental en la vida de los londinenses, conectando a miles de personas y lugares a través de toda la capital. Lleva más de un billón de pasajeros al año -tantos como toda la red nacional de ferrocarriles-, con alrededor de 4 millones de transportes de pasajeros al día.
Su éxito es indudable. Un ejemplo más lo tenemos en la nueva vía del Overground, que une Clapham Junction con Surrey Quays, (completando así la red circular de este metro) y que alcanzó el millón de pasajeros el pasado día 10, después de ser abierta hace escasamente un mes. La última red circular de tren construida en Londres fue la Línea Circular del Metro, inaugurada hace ahora 128 años.
La antigua y centenaria Metropolitan Line./Wendy Neville/Transport for London.La idea original de construir una vía férrea surgió porque, durante la época victoriana, al final del trayecto de Farringdon se encontraba la City, zona de trabajo de todas las clases, sobrecargada de población residente, pasajera y obrera. Carruajes, coches de alquiler, pequeños autobuses… sumado a las 200.000 personas que transitaban por el área, provocaban un embotellamiento constante en una zona relativamente pequeña.
La solución para descongestionar el lugar fue crear este metro que hacía más fácil la vida, principalmente, a los obreros, que podían así residir en zonas más económicas de la ciudad.