El Ministro de Hacienda, George Osborne, sigue presentando propuestas polémicas que están ocupando los titulares de los principales periódicos británicos. Ayer mismo, hacía pública una política por la cual los desempleados que reciben ayuda por parte del gobierno tendrán que trabajar para poder cobrar su subsidio.
La propuesta anunciada ayer en el congreso que el partido del gobierno celebró en Manchester obligará a los desempleados a trabajar un mínimo de 30 horas semanales en trabajos comunitarios como pueden ser recoger la basura o atención a ancianos. También tendrán que acudir diariamente a la agencia de empleo y asistir a programas para aumentar su nivel de educación.
En las propias palabras de Osborne, «nadie obtendrá algo por nada». Para el ministro de hacienda esta medidad es muy positiva ya que «harán trabajos muy útiles para la comunidad, como preparar comida a los ancianos, recoger la basura, trabajar para una organización benéfica local».