Los próximos 7, 8 y 9 de mayo se celebrará en University College London (UCL) la cuarta edición del congreso anual de la asociación BETA de Jóvenes Doctores en Hispanismo, este año dedicado a ‘Ética(s) y política(s) en la cultura hispánica’. El Ibérico ha entrevistado a Guillermo Laín Corona, coordinador del Congreso, para que nos explique las claves de la asociación BETA y de este evento sobre hispanismo que reunirá en Londres a doctores de diferentes universidades del mundo.
¿Qué es y cómo empieza la asociación BETA?
La asociación BETA comienza a partir de un grupo de miembros de la asociación ALEPH, formada por y para investigadores en literatura hispánica mientras cursaban su doctorado. Este grupo decidimos fundar una asociación que sirviera de plataforma a investigadores recién doctorados dedicados al estudio no sólo de la literatura hispánica, sino también del hispanismo, entendido en un sentido amplio de estudios culturales, cine, literatura… Las primeras ideas surgieron entorno al año 2009, tras el congreso anual de ALEPH realizado en Lisboa. La asociación BETA se fundó un año más tarde en la Universidad Internacional de Andalucía, en la sede de Baeza.
¿Se trata, por tanto, de una asociación internacional con miembros de diferentes países?
Con el transcurso de los años ha ido variando la procedencia de los socios, pero no sólo se ciñe a España y Latinoamérica, también los hay de Francia, Reino Unido, Hungría, Alemania, EE.UU… Una de las ponentes de este año, por ejemplo, es una chica española que desarrolla su investigación en una universidad de China, lo que demuestra las dificultades a las que se enfrentan los jóvenes investigadores españoles de hispanismo…No hay salidas en España y… ¡hay que irse a China!
¿Es más fácil entonces conseguir financiación para investigaciones sobre hispanismo en otros países que en España?
No sabría decir… En Reino Unido es cierto que desde finales del siglo XIX hay una larga tradición de estudios hispánicos, con personalidades como Raymon Carr o Paul Preston. También hay una fuerte tradición de investigación en hispanismo en otros países, como EEUU o Francia. En España se ha recortado mucho en investigación y los primeros que sufren generalmente son las Humanidades. Mientras que en algunos países de Latinoamérica, se están abriendo nuevas vías, porque están emergiendo rápidamente. Una compañera de Chile en UCL, por ejemplo, se ha ido recientemente a su país con una importante beca postdoctoral, y me comentaba que ella veía fácil conseguir después una plaza estable allí, y eso en España es impensable. Da la sensación de que en Latinoamérica se está apostando mucho por la investigación en los últimos años.
¿Cuáles son los objetivos principales de la asociación?
Hoy en día, por varias razones, se exige un nivel de preparación a los futuros investigadores mucho mayor que el de antes. Unamuno consiguió su plaza de griego antes de los 30 años, pero hoy se exige que un estudiante haga carrera, master, doctorado y una o dos investigaciones post-doctorales antes de conseguir una plaza. Por tanto, la asociación intenta ser una plataforma para la etapa postdoctoral en el hispanismo, para ayudarnos unos a los otros, compartir experiencias sobre becas conseguidas e ideas y difusión de proyectos
¿Qué destacarías del ‘Congreso BETA 2014: Ética(s) y política(s) en la cultura hispana’?
Me impresiona ver la cantidad diferente de procedencias. Una de las prioridades de BETA es que pretende ser una asociación internacional y este año hemos conseguido ampliar el número de participantes procedentes de diversos países. El congreso también busca analizar los hechos culturales en sí mismos, los temas que tienen que ver con problemas éticos o políticos a través de novelas, películas…Pero también el análisis del contexto, como las políticas culturales de los gobiernos, especialmente en el panorama de recortes actual.
A rasgos generales, ¿cuáles son las temáticas que se tratarán en las 19 mesas?
Se puede hacer una división por áreas geográficas: hay un equilibrio entre temas que tienen que ver con Latinoamérica y con España. También hay un equilibrio temático, entre, por un lado, literatura, con tres ramas fundamentales, narrativa, poesía y teatro, y, por otro lado, estudios culturales, lo que en este congreso abarca cine, humanidades digitales, cultura audiovisual, cuestiones de género, inmigración… Fíjate, lo curioso, que hay una charla sobre temas húngaros anticomunistas en el cine franquista, que la da un investigador de la Universidad de Snegez.
¿Y sobre los ponentes?
Tenemos la suerte de que las tres conferencias plenarias las dan catedráticos de mucho prestigio. La catedrática Rolena Adorno, de la Universidad de Yale, es una eminencia en literatura latinoamericana colonial. En el congreso nos va a hablar de «El México antiguo en el Barroco de Indias». También es una eminencia José Ignacio Díez, catedrático de literatura española de la Universidad Complutense de Madrid, que tanto ha estudiado la literatura del Siglo de Oro y que actualmente está muy centrado en literatura española del siglo XX. En este campo ha desarrollado investigaciones que han sido punteras. Concretamente es uno de los principales investigadores que están promoviendo la lectura e investigación de la obra de Francisco Umbral, especialmente desde su muerte en 2007. Por último, Stephen Hart, catedrático de cultura latinoamericana en UCL, ha publicado libros fundamentales sobre Gabriel García Márquez, es Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Perú.
¿Cuáles son las expectativas para el Congreso BETA 2014?
Como en todos los congresos previos, pretendemos ampliar el número de miembros de la asociación, favorecer la interacción entre los jóvenes investigadores y los ponentes, también lograr que salgan ideas útiles para el futuro, colaboraciones en investigación, posibilidades laborales. Y que a través del Congreso se dé visibilidad a la asociación BETA, porque al tener miembros tan dispersos, lo que le da estabilidad es el congreso anual… Por eso, es preciso que de este congreso salga la sede del año que viene.