Entre los días martes y miércoles, tres personas han muerto ahogadas, coincidiendo con los días más calurosos que ha soportado Reino Unido. Los equipos de rescate han advertido que hay que tomar precauciones a la hora de nadar en lagos y en piscinas no supervisadas.
[pullquote]El 40% de las muertes provienen de gente que cae en el agua. [/pullquote]
Tres víctimas mortales en 24 horas
La primera víctima de 21 años cayó al Lammas Lake, al oeste de Londres, mientras caminaba con sus amigos por la orilla del lago. El hombre, que no sabía nadar, se resbaló y cayó al agua siendo arrastrado por la corriente. Uno de sus amigos, socorrista entrenado, se lazó al rescate en un intento desesperado de recuperar el cuerpo sumergido. Finalmente fue localizado por buzos de la policía 2 horas después.
El segundo accidente ocurrió en la playa de Brighton, a unos 200 metros del muelle. Un londinense de 44 años de edad murió ahogado mientras disfrutaba de un caluroso día de verano. Varios testigos señalan la gran labor de los servicios médicos tras intentar, sin éxito, reanimar al hombre. Tras las dificultades presenciadas la víctima fue trasladada al hospital de Royal Sussex County, donde falleció poco después.
La tercera víctima mortal, un hombre de 29 años, falleció ahogado en el centro Shadwell Basin de Londres. El hombre se adentró en el agua y no pudo volver a salir a la superficie. Los servicios de emergencia se apresuraron a la escena y, finalmente, un buzo de la policía recuperó el cuerpo sin vida del fondo de la piscina mientras centenares de personas presenciaban la escena.
Mike Dunn, director de Education at Royal Lifesaving Society, ha declarado que estos ahogamientos recientes parecen ser una trágica repetición de lo que hemos visto en los veranos anteriores cuando hay un aumento en los incidentes con aumentos de temperaturas. La organización advierte que la mayoría de la gente en el Reino Unido se ahoga en las aguas interiores, lagos y ríos, donde existen aguas pantanosas y corrientes peligrosas, y un porcentaje del 40% de las muertes provienen de gente que cae en el agua.