Los oficinistas de Londres están considerando la posibilidad de abandonar la ciudad. Se inclinan a favor de la costa y de una mejor calidad de vida, según las investigaciones. Un estudio ha revelado que la pandemia causada por la Covid-19, ha hecho que el 60% de estos trabajadores reconsidere su situación de vida.
Las ciudades Brighton y Hove han demostrado ser el destino más popular. Y es que el 30% de los migrantes potenciales escogen esta opción como principal para mudarse. Uno de cada cinco (19%), ha dicho incluso que le gustaría vivir en una casa en la playa. Del mismo modo, Margate, Tunbridge Wells, Devon y Cornwall también han demostrado ser ciudades populares entre los oficinistas.
El 43% de los oficinistas están ansiosos de costos de vida más baratos
Una investigación, encargada por la agencia de alquileres en línea Mashroom, ha concluido que los oficinistas buscan estilos de vida más económicos. Esto se debe a que los encuestados están pagando actualmente un promedio de 1.464 libras al mes en alojamiento. Entre las demás prioridades, se encuentran también un estilo de vida más tranquilo (43%), estar a la orilla del mar (42%) y tener un mejor acceso al aire limpio (41%). Otros dicen que desean lograr un mejor equilibrio entre el trabajo y la vida privada (35%). También desean poder «desconectarse» al final de la jornada laboral (31%).
El director general de Mashroom, Stepan Dobrovolskiy, ha explicado la situación. «A medida que los oficinistas se abren al trabajo a distancia como la nueva forma de vida, millones de inquilinos están reconsiderando sus condiciones de vida». «No es sorprendente que tantos anhelen una escapada a la costa o al campo.»
El 40% de los encuestados se irían de Londres si pudieran permitirse una propiedad con espacio exterior
Casi las tres cuartas partes de los oficinistas (72%) pueden actualmente trabajar desde su casa. En particular, el 34% lo hace cinco días a la semana.
En lo que respecta a los desplazamientos, OnePoll ha realizado un el estudio con 500 trabajadores londinenses de 20 a 60 años de edad. Éste ha revelado que los trabajadores encuestados tardan un promedio de 42 minutos para llegar a la oficina. Sin embargo, el 68% de ellos aprovecharía la oportunidad de vivir en el extranjero si su trabajo se lo permitiera.
Para concluir, Dobrovolskiy ha añadido: «Los propietarios podrían estar listos para un auge en los negocios. Esto se debe a que una vivienda más asequible hace que el estilo de vida sea mucho más agradable. Los caseros de Londres tendrán que asegurar la relación calidad-precio para atraer a los inquilinos a quedarse.»