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Porciones desproporcionadas

Con la gran oferta que existe hoy día de comidas rápidas y de restaurantes que nos venden la ilusión de “más por menos”, el tamaño de las porciones de alimentos y bebidas ha aumentado drásticamente; y con ello, la circunferencia de la cintura de muchas personas y las enfermedades asociadas al sobrepeso.

Desgraciadamente cada vez más tendemos más a comer fuera de casa, ya sea por conveniencia, comodidad o costumbre; por lo que estamos a merced de las recetas poco saludables que ofrece el mercado. Pero incluso si comemos en casa, la cantidad de comida que llevamos a la mesa ha incrementado considerablemente y muy a menudo, la cantidad de comida que comemos depende de lo mucho que nos servimos. Cuanto más haya en nuestro plato, más comeremos. Las porciones más grandes pueden hacer que comamos entre un 30% y un 50% más de lo que normalmente comeríamos.

Consejos para controlar las porciones

Disfrutar de los alimentos es un placer y un derecho, pero como todo en esta vida, ¡con moderación! Esa es la clave para mantener equilibrada nuestra salud física, mental y emocional. Aquí te damos unos consejos para controlar tus porciones:

  • Utiliza envases más pequeños. Divide las sobras de comida en contenedores individuales, así te sentirás menos tentado a comer todo lo que queda.
  • Al cocinar en casa, procura que al menos la mitad de tu plato esté destinado a los vegetales y verduras. Esto te ayudará a controlar las otras porciones de carbohidratos y proteínas.
  • Come una ensalada o toma un vaso de agua antes de la comida. Así, disminuirá tu apetito y te dará la sensación de saciedad.
  • Comparte un plato principal. Cuando salgas a comer fuera, comparte con algún amigo o familiar, o pide que envuelvan la mitad del plato para llevar a casa (¡antes de que te lo sirvan!).
  • Come despacio y de manera consciente. Al cerebro le toma algún tiempo apagar las señales de hambre después de comer, así que espera unos 20 minutos antes de levantarte a repetir.
  • Compra meriendas en paquetes individuales, o haz porciones individuales en bolsas separadas. Es más probable que comas en exceso cuando tomas las cosas directamente de contenedores grandes.
  • Sírvete en la cocina y ve a comer a otro sitio. Dejar la comida en la cocina te ayudará a evitar la tentación de servirte de nuevo.
  • Consume pequeñas comidas a lo largo del día. Esto te mantendrá satisfecho y disminuirá tu necesidad de comer grandes porciones a las horas tradicionales de comida principal.
  • Evita comer frente al televisor, la computadora, o mientras trabajas o realizas otras actividades. De esta manera, serás consciente de la cantidad de alimento que tu cuerpo realmente necesita, en lugar de ser una acción mecánica y sin sentido.
  • La digestión no solo está compuesta de comida, sino también de agua (por lo que procura beber un vaso con agua 15 minutos antes de comer); y de aire, por lo que se recomienda dejar un espacio “vacío” en el estómago y no toparse hasta el hastío.

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