De todos es sabido que tomar un té o un chocolate caliente cuando uno no se encuentra en plena forma sienta de maravilla. Científicos de la Universidad de Cardiff, en el Reino Unido, ahora han corroborado que esto puede ejercer de medicamento al reducir los síntomas del resfriado.
De esta manera, una bebida caliente alivia el dolor de garganta, reduce los estornudos y revitaliza el cuerpo.
El estudio, publicado en la revista Rhinology, prueba que el simple hecho de beber algo caliente también disminuye los molestos escalofríos que suelen acompañar a la gripe y las enfermedades víricas. La clave está en que la temperatura esté alta, para que surta efecto.
Uno de los autores del trabajo, Ron Eccles, afirma: «La gran ventaja de este tratamiento sintomático es que es barato, seguro y efectivo. Es sorprendente que este sea el primer estudio que analiza los efectos de una bebida caliente sobre el resfriado.»