El tenista español Rafa Nadal ha conquistado su séptimo título en Roland Garros, tras derrotar en la final al serbio Novak Djokovic por 6-4, 6-3, 2-6 y 7-5, en un partido que ha acabado hoy lunes tras la suspensión ayer por la lluvia. El balear ha recuperado rápidamente el servicio que había perdido en los primeros compases del cuarto set antes de que se parase el choque el domingo, y, con unas condiciones mejores, ha igualado el encuentro para acabar decantando la balanza a su favor con una rotura en el duodécimo juego.
Nadal preserva, además, su puesto de número dos del mundo, que hubiera cedido en caso de derrota en la final contra Djokovic. El número uno mantiene su puesto, pero se ve privado de sumar su cuarto título grande consecutivo, algo que hubiera logrado en caso de vencer en su primera final en París.
Con el séptimo triunfo en Roland Garros Nadal supera a Borg e iguala a la estadounidense Chris Evert, vencedora en 1974, 1975, 1979, 1980, 1983, 1985 y 1986.
La reanudación de la finalísima, que ayer domingo tuvo que ser suspendida por la aparición insistente de la lluvia, siguió el mismo guión que el inicio de la contienda: un Nadal fuerte y seguro, y extremadamente concentrado, parecía amedrentar a un Djokovic más dubitativo. Incluso la lluvia, como ayer, quiso erigirse, de nuevo, en protagonista haciendo acto de presencia de nuevo. Ésta, sin embargo, no impidió la disputa del partido.