Treinta personas tuvieron que ser rescatadas tras incendiarse el barco en el que navegaban a través del Támesis durante el día de ayer. Este tipo de barcos, anfibios de la Segunda Guerra Mundial reconvertidos en barcos turísticos, están gestionados por London Duck Tours. Esta empresa lleva trabajando en el sector de las rutas turísticas desde 2002.
Pasado el mediodía, durante una de las rutas que este barco ofrece, un total de 28 turistas y 2 miembros de la tripulación se vieron obligados a abandonar el bote debido a un incendio en el mismo. Muchos de ellos saltaron al agua por miedo a que la embarcación explotase.
El rescate fue llevado a cabo por la brigada de bomberos. Tres personas, entre ellas una mujer embarazada, tuvieron que ser tratadas en el hospital por inhalación de humo. Mientras que varios de ellos recibieron tratamiento en el momento por congelación, debido al frío estado del agua.
Una de las víctimas, Donna Wood, de Australia contaba al Telegraph su experiencia: «Vimos humo, vimos fuego, asi que mi marido y yo pensamos que era mejor saltar al río, somos australianos, no tenemos problemas para nadar».
No es el primer problema que este tipo de embarcaciones sufre. El pasado junio, 31 personas tuvieron que ser rescatadas después de que uno de estos botes encallase en el Albert Dock de Liverpool cuando hacía una de sus rutas turísticas por la ciudad de los Beatles. Al mes siguiente La Marina y el Cuerpo de Guardacostas retiraron 7 de los 9 barcos que forman la flota de London Duck Tours por cuestiones de seguridad.
Video del rescate:
