Transport for London ha anunciado esta semana cuáles son las líneas de metro más calurosas durante el verano. El ranking las ordena de las más calurosas a las menos. Algunas sobrepasan los 25 grados.
El verano en Londres es la época del año más esperada por la mayoría de los londinenses. La ciudad se llena de eventos musicales como festivales y conciertos de todo tipo además de teatros y cines al aire libre. El frío ya no es un inconveniente para pasar la tarde en el parque y, con un poco de suerte, las suaves temperaturas vienen acompañadas de un cielo despejado. Sin embargo, aunque en el exterior el tiempo sea de lo más agradable, todo el mundo sabe que en el metro de Londres te sientes como en un desierto. Todos los trayectos se vuelven incómodos, calurosos y pegajosos, algunos más que otros.
Bakerloo Line y el andén de Marble Arch alcanzan las máximas temperaturas
Bakerloo Line lidera la clasificación del estudio con temperaturas que alcanzan los 27 grados en verano. Este dato no es de extrañar, ya que ésta es una de las líneas de metro más viejas de todo el sistema de metro londinense. En agosto del año pasado llegó a alcanzar los 31 grados. La segunda posición se la lleva la Central Line con 26 grados, por ser la más concurrida. El tercer puesto, por su parte, es para la Northern Line, con 25 grados. Para los viajeros de metro que quieran evitar el bochorno, el aire acondicionado de las District, Circle o Metropolitan lines hacen bajar las temperaturas a unos soportables 18 grados.
Otro estudio de Tfl mostraba los andenes de metro más calurosos el verano pasado. Marble Arch, en la Central Line, alcanzó una media de 31.69 grados el pasado agosto. Le sigue Bond Street, con 31.48 grados; y Paddington, en la línea Bakerloo line, con 31.19 grados.