«Jamey es estúpido, gordo, feo y gay. ¡Debe morir!», es uno de los mensajes que recibió la víctima
Después de confesar su homosexualidad fue víctima ‘online’ del acoso homofóbico. El joven informó de las amenazas que recibía a través de Internet, pero afirmó antes de suicidarse, que nadie le hacía caso.
Jamey Rodemeyer, un joven estadounidense de 14 años había confesado su orientación sexual públicamente y había participado en una campaña en Internet ‘It Gets Better’, donde jóvenes acompañados de famosos, dan apoyo a los adolescentes homosexuales que están discriminados. Su aparición en la red vino acompañada de una serie de mensajes denigrantes hacia su integridad física y psíquica. Unas frases que incluso cuestionaban su derecho a vivir.
«Jamey es estúpido, gordo, feo y gay. ¡Debe morir!», o «No me importa si muere. A nadie le importará, así que hazlo, haznos un día feliz a todos», son dos de los mensajes que recibió antes de dar un paso decisivo en su vida, el suicidio. El joven hizo público las amenazas que recibía a través de un vídeo que colgó en el portal Youtube y en su blog, en ellos decía y escribía «Siempre digo que tengo miedo, pero nadie me escucha. ¿Qué tengo que hacer para que la gente me escuche?», o que «estaba deseando ver a su abuela».
Uno de sus últimos mensajes, antes de que el cuerpo del joven fuera encontrado sin vida, decía así: «Yo sólo quiero decir adiós, desaparecer sin que nadie lo sepa», frase que el adolescente cogió de una de las canciones del grupo ‘Muertos Vivientes de Hollywood’.