Fiona Turton, de Brighton, alquila su establo por 12 libras la noche durante el mes de diciembre. El lugar viene con accesorios como una cama de paja, un pesebre y un burro, en un esfuerzo por hacer recordar a los británicos la magia de la Navidad.
Con esta nueva versión del pesebre, el lugar representativo del nacimiento de Cristo está equipado con electricidad, calefacción, librería y chimenea. Además de una cama de paja para dos, un pesebre y un burro, el «pequeño belén» se completa con un sofá y una tetera.
Aquellos a los que nos les importe abonar un coste adicional, podrán disfrutar de disfraces, toallas de baño y red WiFi. Las lecciones navideñas, sin embargo, son gratuitas.
Fiona Turton, precursora de la idea, explica al diario Metro sus impresiones sobre la iniciativa: «Me encanta la idea de alquilar mi establo a la gente que quiere estar un poco más cerca de la Navidad.» Además, añade: «Proveemos a nuestros invitados de una auténtica experiencia navideña. Espero que puedan descubrir el verdadero significado de la Navidad; todo el dinero va para una gran causa.» Y esto es cierto, puesto que los fondos serán destinados a la investigación contra la leucemia y el linfoma.