El número de estudiantes que eligen ir a la universidad ha disminuido notablemente por primera vez en ocho años. Esta conclusión se ha obtenido de una encuesta realizada por Sutton Trust, una fundación que facilita la movilidad de estudiantes en Reino Unido, publicada por el periódico británico Independent.
El estudio ha analizado a más de 2.600 personas de entre 11 y 16 años de Inglaterra y Gales y el resultado obtenido ha mostrado que un 14% de jóvenes no quiere ir a la universidad, a diferencia de la encuesta del año pasado que fue el 11%. Esto se debe a que los jóvenes pierden el interés y no están contentos con ir a la facultad.
Estos estudiantes no quieren a la universidad ir por razones varias: la más relevante es por cuestiones económicas, pero hay otros jóvenes que no creen que son lo suficientemente inteligentes como para entrar o que no necesitan un título para conseguir los trabajos que quieren. Otro motivo es que simplemente no les gusta estudiar o no quieren seguir haciéndolo.
En cuanto a los problemas económicos, lo más costoso es la matrícula de ingreso y los préstamos que piden los estudiantes, cifra que ha crecido desde un 4.6% a un 6.1%. El pasado mes de julio, se publicó una encuesta en la que el número de estudiantes matriculados para el curso 2017/2018 ha descendido un 4%, pasando de 674,890 en 2016 a 649,700 este año.
El principal problema son los gastos económicos que supone
El Brexit, es otra de las razones que también afectan a los estudiantes ya que, en el caso de los españoles, más de 200.000 viven en el Reino Unido y están preocupados por su futuro, especulando cuál será el resultado de las negociaciones entre Reino Unido y la Unión Europea.
Además, durante los últimos meses, las universidades británicas han bajado en los rankings mundiales y algunos de los expertos culpan a la presión que sufren las universidades por aceptar a estudiantes más diversos, lo que desvía su atención para atraer a los más talentosos.
