Parece ser que Leo Messi ya no está en racha. Al menos, así lo ha demostrado en el encuentro que tuvo lugar ayer en el estadio inglés de Stamford Bridge, donde, a pesar de haber tenido oportunidades de gol, el argentino no logró traspasar la portería del Chelsea, equipo que puede presumir de ser uno de los pocos a los que Messi no ha marcado.
A final de la primera parte se producían dos hechos que hicieron temblar a los seguidores de ambos bandos. Uno, por preocupación, ante la caída del argentino que hizo temer por una posible lesión en la pierna; el otro, de alegría para los británicos, al ver como Drogba, en la única oportunidad de gol para los ingleses, colaba el balón en la portería blaugrana.
Sin embargo, no ha sido un partido nefasto para el Barcelona. Con un gran dominio claro del partido, los ánimos de los azulgranas cayeron en el momento en que el Chelsea se acercaba a la victoria con el gol del Drogba. De hecho, el control del encuentro se centraba principalmente en los centrocampistas blaugranas.
Oportunidades de gol desperdiciadas dejaron al Barcelona sumido en la derrota, como la de Pedro, que envió el esférico al poste, con tal mala suerte que Busquets no pudo centrarlo en la portería inglesa.
Una nueva oportunidad de rebatir esta derrota la tendrán el próximo martes en el Camp Nou. Mientras tanto, ahora hay que pensar en el próximo partido del sábado, día qué se disputará uno de los Clásicos entre el Real Madrid y Barcelona.