«Sorpréndenos a todos y apoya un segundo referéndum«. En esos términos se ha dirigido el líder del Partido Liberal Demócrata, Vince Cable, a la primera ministra británica Theresa May. Y en esos mismos términos va también Cable a apelar a la premier durante su discurso en la conferencia de la formación liberal demócrata que concluye esta tarde. May, por su parte, insiste en que no va a convocar otro referendo «bajo ninguna circunstancia».
La negativa por activa y por pasiva de Theresa May a hacer realidad un segundo referéndum en el que la población británica pueda aprobar o suspender el acuerdo (o no acuerdo) con la Unión Europea trae consigo consecuencias. Por ejemplo, la manifestación People´s Vote March For The Future que recorrerá las calles de Londres. Será el próximo 20 de octubre.
WATCH: We’re heading for a blindfold Brexit – leaving the EU with no idea where we’re going. Brextremists like Gove back this as it will enable the hardest of Brexit after March 2019.
Nobody voted for a blindfold Brexit. That’s why we need a #PeoplesVote. Please RT: pic.twitter.com/Qu91nV53Px
— People’s Vote UK (@peoplesvote_uk) September 18, 2018
En esa marcha, los manifestantes alzarán la voz para dejarle bien claro al Gobierno que quieren tener la última palabra en lo que al futuro del país respecta. Y que, en esa última palabra también deberían poder optar a revertir el Brexit y permanecer en la Unión Europea.
«Voy a hacer todo lo que pueda para parar el Brexit en el Parlamento»
Vince Cable ha mostrado públicamente su apoyo a esa manifestación que se celebra en poco más de un mes. También ha anunciado que los miembros de su partido no van a apoyar la propuesta que Theresa May someta a votación en el Parlamento. La intención de Cable es conocida: quiere que la sede parlamentaria sea el lugar donde se tumbe el Brexit. Misión, cuanto menos, complicada.
Pero misión en la que cree el líder liberal demócrata, porque salir de la Unión Europea de la manera en la que lo están planteando los conservadores podría acarrear «años de sufrimiento económico». Algo que, según indica Cable, no ven venir los «brexiteers fundamentalistas», cegados por sus ganas de abandonar la Unión Europea a toda costa.
El ultimátum de Theresa May: O apoyáis Chequers o apoyáis un divorcio sin pacto
Mientras continúan las presiones procedentes de la opinión pública para que se celebre un segundo referéndum, Theresa May hace oídos sordos y sigue a lo suyo. Lo suyo es intentar que desde Bruselas acepten el plan, bautizado como el plan Chequers, que la premier ha puesto encima de la mesa negociadora. Si salen adelante las negociaciones, la propuesta será llevada al Parlamento donde los diputados tendrían que aprobarla. En caso de que se nieguen, May ha advertido que la alternativa es apoyar un divorcio sin pacto con la Unión Europea.
De momento, se antoja complicado que la Unión Europea acepte esa hoja de ruta. Entre otras cosas porque se argumenta que de aceptar, Reino Unido quedaría en un escenario de ventaja competitiva con respecto a los demás países miembros. Y que ello podría desencandenar en que esos miembros en desventaja buscarían igualar la balanza, posiblemente planteando también la opción de abandonar el marco europeo. Lo cual podría significar el principio del fin de la Unión Europea tal y como la conocemos.