Como ya anunciábamos en anterior noticia el Ministerio de Educación había decidido condicionar la concesión de las ayudas generales para las becas Erasmus a los alumnos que hubieran recibido una beca general de estudios en el año anterior. Lo que significaba que todos los alumnos que no hubieran sido becados previamente se quedarían sin recibir la ayuda ‘complementaria’ de entre 100 y 150 euros mensuales. La noticia llegó como un jarro de agua fría para todos los estudiantes que querían estudiar este año como Erasmus, y para muchos que ya se encuentran en su país destino con el año universitario comenzado.
La presión del PP ha obligado al ministro de Educación a rectificar su polémica medida sobre las becas Erasmus. Wert, acorralado por las comunidades autónomas, las universidades, los partidos políticos y los dirigentes del PP ha dado marcha atrás.
A pesar de todo esto, el ministro ha asegurado que la rectificación ha sido una «iniciativa» de su departamento tras las conversaciones mantenidas con el presidente del Gobierno, la vicepresidencia y el Ministerio de Hacienda. Se toma, ha explicado, una vez comprobado que «se han podido ver defraudadas algunas expectativas de los estudiantes». Efectivamente, muchos de ellos se han quejado al ver que perdían a mitad de curso una ayuda que les era imprescindible para continuar sus estudios en Europa.
Wert anuncia para arreglar este despropósito político que mantendrá la orden emitida el pasado día 24 de octubre —tercera jornada de protestas contra los recortes y su ley educativa— y lanzar una nueva que establezca que los alumnos afectados contarán con el mismo dinero que sus predecesores en este programa de movilidad europeo. Fuentes del ministerio aseguran que habrá más dinero para financiar los estudios de estos universitarios españoles. La partida ministerial —el programa se financia con fondos europeos, gubernamentales y en su caso, si los hay, autonómicos— ha menguado un 71% desde 2011 y hoy es de 16 millones de euros.
Por su parte, la Comisión Europea (CE) afirmó que España debería haber informado a los estudiantes beneficiarios de una Erasmus de que se pensaba reducir la subvención nacional antes del inicio del curso académico, dado que ahora los alumnos desplazados a otras universidades europeas se ven «penalizados». «La decisión tomada por las autoridades españolas debería normalmente haber sido anunciada a los estudiantes antes del inicio del año universitario en curso», dijo el portavoz comunitario Olivier Bailly, durante la conferencia de prensa diaria del organismo.