Diez años han pasado desde que la galería de arte moderno más visitada del mundo abriera sus puertas al público un 12 de mayo
Diez años han pasado desde que la galería de arte moderno más visitada del mundo abriera sus puertas al público un 12 de mayo. Desde entonces, las cifras hablan por sí solas.
Más de 45 millones de visitantes, 52 grandes exposiciones temporales, y más de 800 adquisiciones expuestas en las distintas salas del recinto. La muestra de Matisse-Picasso, presentada en 2002 y con más de 467.000 asistentes, ha sido la más multitudinaria, seguida muy de cerca por la de Edward Hopper, con casi 430.000, en 2004. Frida Kalho, Rothko, Henri Rousseau y Kandinski también encabezan la lista de las top 10.
Para festejar esta primera década de éxito, la Tate Modern organizó del 14 al 16 de mayo el festival «No Soul For Sale A Festival of Independents», tres días de fiesta en el que se mezclaron arte, cine y música, con un cartel impresionante de artistas que iba desde el polifacético Martin Creed, ganador del premio Turner, al cantante y guitarrista americano Thurston Moore, miembro del grupo de rock Sonic Youth.
El objetivo era claro: explorar el puente existente entre el arte visual y la música. JD Spooky, Kaffe Matthews, Cosey Fanni Tutti y Temperatures fueron los encargados de animar las actuaciones nocturnas del décimo aniversario. Además, más de 70 organizaciones de arte independientes procedentes de todos los lugares del mundo, desde Shanghai a Río de Janeiro, pasando por Nueva York, Praga y Berlín estuvieron presentes.
La celebración también tuvo participación española. El artista Martí Anson, con el proyecto «Mataró Chauffeur Service», se convirtió en taxista y trasladó su coche tuneado como un Spanish cab desde Barcelona a Londres para convertirlo en sala de proyecciones de los vídeos de creadores como Jan Dibbets, Roman Keller o Bik vander Pol.
Entre los actos organizados, destacó igualmente la ceremonia de partición y reparto del pastel de cumpleaños, que fue a cargo del artista británico Nicholas Serota, y que contó con la colaboración de 150 niños y niñas de escuelas locales, que participaron en una procesión festiva desde Borough Market hasta la misma Tate Modern, liderada y animada por la «London School of Samba«.
Plataforma artística
En 2004, la Tate Modern abrió un nuevo espacio, situado en el segundo nivel del edificio, dedicado a mostrar el trabajo de artistas contemporáneos emergentes, que hasta la actualidad ha alojado 24 exposiciones. Además, a través de su programa de actuaciones en directo -más de 135 en este período-, ha servido de plataforma privilegiada para que más de 200 artistas de todos los ámbitos experimentaran y exploraran el arte visual a través de un extenso abanico de disciplinas como la coreografía, el cine y la música.
Particularmente memorable fue el espectáculo «Maritime Rites», del compositor Alvin Curran, que se celebró en 2007, y que reunió a músicos voluntarios dirigidos por la «London Symphony Orchestra» en una barcaza sobre el Thames. Durante el concierto, los músicos se sumaron a las campanas de la catedral de St. Paul, situada justo en frente del museo, para presentar un melódico collage de sonidos del puerto y música, todos ellos asociados al río.
Mirando al futuro
La antigua central eléctrica del Bankside mira al futuro con los ojos grandes, llenos de emoción y optimismo. La galería, convertida en la pinacoteca de arte moderno más famosa del mundo y en una de las tres atracciones gratuitas más visitadas del Reino Unido, se ha apuntado desde el principio al uso de las nuevas tecnologías. En este sentido, ha sido el primer gran museo en ofrecer un webcasting en directo de su programación de actividades. Ocupa, además, el primer puesto en el ranking británico en el microblogging de Twitter, y utiliza plataformas como Flickr para invitar al público a sus exposiciones.
Su sección Tate Online está, igualmente, considerada una de las mejores web de entretenimiento y arte. Sin embargo, el plan de futuro más ambicioso de la Tate Modern, que alberga una colección permanente de arte moderno internacional que data desde 1.900 a la actualidad, e incluye obras de algunos de los artistas más destacados del siglo XX como Picasso, Warhol y Dalí, además de exposiciones temporales que presentan las obras de artistas o movimientos importantes dentro del arte moderno, es su ambicioso proyecto de ampliación.
El nuevo edificio que se añadirá a la conocida estructura creará nuevos espacios sociales para debatir y reflexionar sobre el arte, así como para mostrar nuevas exposiciones e instalaciones. Será sostenible, tendrá 7.000 m2, que se sumarán a los 9.000 m2 ya existentes, y se prevé que su construcción finalice en 2012.